El presidente de Argentina, Mauricio Macri, respondió ayer a los insultos que le profirió el dirigente venezolano Diosdado Cabello y advirtió que el "cobarde" es el gobierno del presidente Nicolás Maduro por someter a su pueblo. Macri no apeló a diplomacia alguna para referirse a las acusaciones de Cabello, quien aseguró que la canciller venezolana, Delcy Rodríguez, "fue víctima de una agresión por parte del gobierno del cobarde de Macri en Argentina".
El motivo de la pelea fue la reunión de cancilleres del Mercosur que se realizó el pasado miércoles en Buenos Aires, y a la que Venezuela no fue invitada, ya que sus derechos en el bloque están cesados por una serie de incumplimientos.
Aunque ya sabía que no estaba incluida, la canciller venezolana viajó a la capital argentina e intentó meterse por la fuerza al encuentro, pero sus colegas de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay la dejaron sola.
En un hecho inédito, Rodríguez avanzó hacia el Palacio de San Martín entre forecejeos con la Policía Federal que trataba de contener a los manifestantes que la acompañaban y después denunció que la habían golpeado.