Mamá multiplicada
Para una mujer, convertirse en madre es uno de los pasos naturales de su vida, y que más satisfacción puede otorgarle. Es por eso que cuando llega el momento en el que deciden dar vida a otro ser, puede ser muy difícil enfrentarse a complicaciones físicas que lo impidan.
De acuerdo a datos de la Organización Mundial de la Salud, una de cada cuatro parejas presenta un problema de infertilidad. En México, la cifra asciende a aproximadamente 8 millones de parejas que tienen problemas de fertilidad y cada año aumentan 200 mil más.
Sin embargo, esta situación que puede responder a una serie de condicionantes físicas, en la actualidad ha encontrado una solución con los métodos de reproducción asistida.
Pero, ¿qué sucede cuándo el método de fertilización implica más de un bebé? Para responder todas estás dudas, platicamos con el doctor Carlos Lauro Valdez Zúñiga, Ginecólogo y Obstetra especializado en Biología de la Reproducción Humana.
La reproducción asistida
Muchas veces pensamos que es fácil embarazarnos, sin embargo, esto no es así. La probabilidad de un embarazo en una pareja joven de aproximadamente 30 años y sanos en todos los aspectos, es del 16 al 20 por ciento por cada mes que lo intentan. “Esto si tomamos en cuenta que se tienen relaciones sexuales mínimo dos veces durante el período fértil y si no se utilizan métodos de planificación familiar”, comenta el doctor Valdez Zúñiga.
De acuerdo al especialista, el 85 por ciento de las parejas que intentan embarazarse, lo van a lograr en el transcurso de un año. “Las que no se embarazan durante este año, son catalogadas como parejas con infertilidad, siempre y cuando tengan menos de 35 años”, señala Valdez Zúñiga.
Este limite es marcado porque una vez que se pasa de los 35 años, si la mujer no logra un embarazo en 6 meses, es catalogada con infertilidad y debe de buscar ayuda.
Estas parejas que tienen la probabilidad del 16 al 20 por ciento suponen que la mujer produce un óvulo cada mes, teniendo ciclos menstruales regulares.
La ovulación es una de las principales causas por las cuales la mujer no puede quedar embarazada, así que los tratamientos de reproducción atacan principalmente esta problemática.
“Los medicamentos para inducción de la ovulación y para hiperestimulación ovárica controlada, nos van a aumentar las posibilidades de que en estos ovarios crezca más de un folículo u óvulo”, explica el doctor Valdez Zúñiga.
Dichos medicamentos van a hacer que en lugar de que se produzca un óvulo, estemos aumentando las probabilidades a 2, 3 o incluso 4 folículos en estos ovarios; y entre más óvulos se tienen, mayores son las posibilidades de que uno se fecunde.
Esto sucede en el caso de los tratamientos de reproducción de baja complejidad, mientras tanto en los de alta complejidad, en los que se realiza la extracción de los óvulos de la mujer para su manipulación en un laboratorio; dependiendo de su calidad y de la edad de la mujer, son los embriones que se van a colocar en su matriz.
De acuerdo al doctor Valdez Zúñiga, esta es una práctica que ya está normatizada y que impide colocar más de tres embriones en el útero de una mujer en tratamiento.
Los médicos no tienen control alguno de los embriones que va a llegar a implantarse, por lo tanto puede suceder que no se logre el embarazo o que por el contrario todos los embriones implanten.
Lo inesperado
De todos los embarazos que hay en el mundo, entre el 1 y el 2 por ciento son embarazos múltiples (gemelar, triple, cuádruple, etc.). Siendo más específicos, uno de cada 60 embarazos de manera natural es gemelar; uno de cada 8 mil, es un embarazo triple; y uno de cada 700 mil, es cuádruple.
Cuando se realiza algún tratamiento de reproducción, las probabilidades de tener un embarazo múltiple tienden a aumentar. Por ejemplo, con las técnicas de baja complejidad, del 6 al 14 por ciento de la población tiene un embarazo múltiple. Y con las técnicas de alta complejidad, el 79.8 por ciento de los casos consigue un embarazo único, el 19 por ciento es un embarazo gemelar y solamente el 0.8 por ciento es triple.
“Hay que tener las cosas en claro, sobretodo con la novedad de la reproducción asistida, hay muchas parejas que se acercan pidiendo un embarazo múltiple, pero ese no es el objetivo de los tratamientos”, puntualiza el doctor Valdez Zúñiga.
El médico en reproducción señala que el objetivo de la reproducción asistida es el de lograr un embarazo, con un bebé sano y en óptimas condiciones.
“Al principio suena bonito tener un embarazo múltiple, pero si le preguntamos a las mamás que ya tuvieron un embarazo gemelar o triple, pues esto tiene muchísimas implicaciones”, comenta el especialista.
El reto
Los embarazos múltiples tienen implicaciones médicas, maternas y económicas. Cuando hay un embarazo con más de un producto en camino, se considera de alto riesgo y pueden presentarse complicaciones más latentes de preeclampsia y de diabetes gestacional.
Uno de los mayores riesgos es el parto prematuro y todas las implicaciones que este conlleva. “Los problemas con los bebés que nacen antes de tiempo son visuales, de retraso psicomotor, y pulmonares, ya que muchas veces no alcanzan a desarrollarse al cien por ciento”, argumenta el doctor Valdez Zúñiga. Las infecciones y la baja glucosa también son otras complicaciones que pueden afectar a los bebés.
Por el lado materno, los problemas de salud y psicológicos a los que se enfrenta en un embarazo múltiple, son un reto mucho mayor que cuando solo se trata de un bebé.
Dicha situación ha llevado a que en países como Estados Unidos, donde está bien reglamentada la reproducción asistida, las madres tengan que recurrir a la reducción fetal o aborto selectivo con tal de proteger su vida y la de alguno de sus hijos en camino.
En México no se cuenta con esa opción, que a pesar de ser difícil y en ocasiones desgarradora para los padres, resulta necesaria. En el país, las parejas que recurren a los tratamientos de reproducción se enfrentan a una realidad compleja al momento de su nacimiento.
“Cualquier embarazo múltiple tiene un incremento en el costo de hospitalización, en el costo de cuidados neonatales y a lo largo de la vida con costos relacionados a posibles complicaciones, especialmente en bebés prematuros extremos”, señala el doctor Valdez Zúñiga.
De tal manera que si se hace una comparación de un embarazo único con un embarazo gemelar, el costo del segundo es cuatro veces mayor y en el caso de un embarazo triple, aumenta hasta 10 veces más.
“Un embarazo múltiple no es lo que parece. El objetivo de la reproducción asistida es mantener el equilibrio entre la probabilidad de lograr un embarazo único, disminuyendo al máximo el riesgo de un embarazo múltiple. No estamos aquí para hacer bebés en serie”, agrega el doctor Valdez Zúñiga.
La mejor solución
Hay condicionantes, además de la genética, que van a promover un embarazo múltiple, la edad de la paciente es uno de ellos.
En la actualidad la mujer busca el embarazo a una edad más avanzada por diferentes motivos, especialmente de desarrollo profesional. Tomando en cuenta que la edad ideal para embarazarse es entre los 24 y 27 años, y que muchas mujeres en esos años apenas se encuentran finalizando una carrera, en su primer trabajo o siguiendo su preparación académica, la mayoría decide embarazarse en una etapa de sub fertilidad.
“Esto es terrible porque a partir de los 35 años de edad, la probabilidad de lograr un embarazo va disminuyendo de manera considerable”, advierte Valdez Zúñiga.
Según la historia natural de la fertilidad de la mujer, la fertilidad óptima está entre los 20 y 30 años de edad, después viene la etapa de la sub fertilidad que va de los 30 a los 41, y a partir de ahí ya se presenta la pre menopausia y menopausia.
“El retraso de la edad sí está relacionado en que obviamente a mayor edad, mayor dificultad para lograr un embarazo. Y si eso sucede, se recurre a técnicas de reproducción asistida con un incremento en la posibilidad de un embarazo múltiple”, dice el médico.
La mejor forma de prevenir un embarazo múltiple y todas sus complicaciones es atendiéndose antes de que la infertilidad sea más difícil de tratar. Por parte de los especialistas, ellos pueden llevar un control de los embriones para darle la consejería adecuada a su paciente.
Los embarazos de alto orden fetal significan un reto al que muchas parejas no están preparadas. Sus complicaciones no son dimensionadas, de tal manera que es responsabilidad del médico explicarles a lo que se van a enfrentar.
A pesar de esta situación, hay mamás multiplicadas que han sabido enfrentar estas situaciones adversas y es totalmente reconocible su labor.
Factores a cuidar para evitar embarazo múltiple
- La edad de la pacientes
- Su índice de masa corporal
- Su respuesta ovárica (baja, normo o hiperrespondedora)
-Antecedentes de embarazo múltiple
“El objetivo de la reproducción asistida es mantener el equilibrio entre la probabilidad de lograr un embarazo único, disminuyendo al máximo el riesgo de un embarazo múltiple. No estamos aquí para hacer bebés en serie”.
— Carlos Lauro Valdez Zúñiga,
ginecólogo
Fuentes:
www.who.int/es/, www.inegi.org.mx,
