Será recordado como uno de los críticos de arte más claros, precisos y perspicaces del siglo XX a la actualidad. (ARCHIVO)
Considerado uno de los principales gestores e historiadores de arte en México, el investigador Jorge Alberto Manrique, quien murió esta semana pasada a los 80 años de edad, y recordado como uno de los críticos de arte más claros, precisos y perspicaces del siglo XX a la actualidad, es el personaje de la semana de quien se comparten algunos datos biográficos.
Jorge Alberto Manrique nació en Azcapotzalco, Ciudad de México, el 17 de julio de 1936. Estudió en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM de 1955 a 1959 y en 1962 obtuvo la licenciatura en Historia. También realizó estudios de postgrado en historia del arte en las universidades de París y Roma, señala su perfil publicado por el Instituto de Investigaciones Estéticas.
De acuerdo con el portal Arte e Historia, de la carrera de Manrique se resalta su labor es la crítica de arte y como historiador, que a través de dinámicos textos, abarca varios siglos.
Los textos de Manrique abordaron arte novohispano, manierismo, la Escuela Mexicana de Pintura, o de arte moderno como el geometrismo mexicano, arte latinoamericano de los años 1960-1980 y tendencias de carácter político que surgieron a partir de 1968 y han sido fundamentales para las nuevas generaciones de historiadores y críticos del arte.
Dentro de las funciones que desempeñó, destaca la dirección del Instituto de Investigaciones Estéticas, electo por la Junta de Gobierno (1974-1980), mientras que en 2003 esta institución lo nombró Investigador Emérito.
Fue también director fundador del Museo Nacional de Arte del Instituto Nacional de Bellas Artes (1982-1983) y Director del Museo de Arte Moderno del Instituto Nacional de Bellas Artes (1987-1988).
Fue profesor en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Veracruzana y director de la misma. También fue editor responsable de la Revista de la Universidad, además de ser profesor de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad.
Entre sus publicaciones destacan Los dominicos de Azcapotzalco, El geometrismo mexicano, La dispersión del manierismo, Una mujer en el arte mexicano, Arte y artistas mexicanos del siglo XX, Una visión del arte y de la historia, entre otras.
Además fue miembro de instituciones como el Sistema Nacional de Investigadores, nivel III, del CONACYT, Miembro de número de la Academia Mexicana de la Historia y Miembro de número del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios Histórico-Artísticos Mexicano, del que fue presidente.
Entre los múltiples reconocimientos que recibió se encuentran el Premio a la Crítica Joven México en la Cultura Paul Westheim, Comendador de la Orden del Mérito de la República Italiana y el Premio Universidad Nacional de la UNAM.