Las futbolistas brasileñas se lamentan tras la derrota ante el combinado de Suecia en la tanda de penales. (AP)
Se arrodilló en el césped del estadio Maracaná y los ojos se le llenaron de lágrimas.
Pensó que finalmente se daría el gusto de festejar un título con Brasil en su propia tierra, pero no pudo ser. Nuevamente Marta y Brasil se quedaron cortas.
Suecia derrotó el martes a las dueñas de casa por penales en las semifinales olímpicas del fútbol femenino luego de que el partido terminase 0-0 y condenó a Brasil a jugar por el bronce, no por el oro que tanto ansiaba.
El oro lo dirimirán Suecia y Alemania, que despachó 2-0 a Canadá.
Hasta las jugadoras suecas trataron de consolar a Marta, que milita en un club de ese país desde hace cuatro años. Se alzó cinco veces seguidas con el premio a la Mejor Jugadora del Año de la FIFA y es considerada la mejor futbolista de la historia.
"Elogiaron a nuestro equipo y dijeron que lamentaban habernos dejado afuera de la final", comentó Marta. "Querían que llegásemos a la final. Pero así es el fútbol. Alguien tiene que perder. Lucharon hasta el final, igual que nosotras, y les fue bien en los penales".
Cuando finalmente volvió a levantarse, se fundió en un abrazo con Pia Sundhage, la técnica de Suecia.
"Todas las jugadoras suecas conocen muy bien a Marta. Creo que hizo un partido buenísimo", dijo Sundhage. "Nos creó problemas, pero al final de cuentas, pudimos controlarla".
Marta entusiasmó a los brasileños con su juego y cuando la selección masculina tuvo un mal arranque, mucha gente tachó el nombre de Neymar en sus camisetas con el número 10 y puso el de Marta.