Se arriesgan. Decenas de familias laguneras se siguen acercando al margen del río, a pesar de las advertencias oficiales. (ROBERTO ITURRIAGA)
Sólo un metro separa a Gerardo Martínez y a sus dos pequeños hijos del cauce del río Nazas, el padre de familia decidió que el sábado por la mañana era un buen momento para tomarse "la foto del recuerdo" cerca del puente plateado.
"Es que no se ve tan seguido, luego mis hijos me van a reclamar por no haberlos traído cuando llegó el agua".
Tan sólo unos minutos después, el hombre sostiene a uno de sus pequeños hijos del brazo, luego lo acerca lo suficiente para que meta sus manos directamente al agua del río.
La maniobra es arriesgada pero se realiza con rapidez, luego se retiran cuando ven que se acerca una camioneta de Protección Civil a vigilar la zona.
"Es el cuento de nunca acabar, se pueden tomar la foto pero desde lejos, no entienden... nada más nos hacen más pesado el trabajo", reclama uno de los tripulantes de la camioneta oficial.