Un ejemplo. Dorothy Ruiz, ingeniera mexicana de la NASA, impartió ayer una conferencia en Torreón.
EL SIGLO DE TORREÓN
La mexicana Dorothy Ruiz Martínez, ingeniera aeroespacial en la Agencia Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés) fue designada para manejar las comunicaciones de la base de control para el proyecto EM-1 que consiste en enviar en 2018 un vehículo no tripulado a la Luna.
Dos años después, en 2020, estará a cargo de la misión control de lo que se ha denominado como el "próximo gran salto para la humanidad": el regreso al planeta Marte.
"Imagínate, en 2018 vamos a regresar a la Luna; (…) desde abajo, desde la misión control, vamos a estar mandando un vehículo no tripulado a la Luna (…) después, en 2020, vamos a regresar a Marte, se me pone la piel chinita nada más de pensar que voy a estar ahí, manejando estos vehículos que van a la Luna y a Marte", señaló.
Dorothy creció en Matehuala, San Luis Potosí, y a los 16 años de edad, emigró a Estados Unidos. Tiene especialización en Diseño de Cohetes y forma parte de la organización de misiones de operaciones de vuelos espaciales para la Estación Espacial Internacional (EEI).
Entre otros logros, propuso una colaboración de estudio con otros científicos de la NASA y un científico mexicano para hacer investigaciones sobre el nopal para futuras misiones, ya que esta planta puede servir en el aclaramiento del agua.
La ingeniera Ruiz se presentó ayer en la LIX Conferencia Rotaria Distrito 4110 en el Teatro Nazas de Torreón.