Joao Grangeiro, director de los servicios médicos de los Juegos.
El director de servicios médicos para los Juegos Olímpicos Río 2016, Joao Grangeiro, aminoró el riesgo de que atletas, espectadores y organizadores contraigan el virus del zika durante la justa veraniega.
Agosto y septiembre, meses en los cuales serán celebrados los Juegos, coinciden con la temporada de invierno en Brasil, lo cual provoca una baja presencia del mosquito "aedes aegypti", transmisor del zika y dengue.
Grangeiro indicó que se realizaron 44 eventos deportivos de prueba durante un año, la mayoría en el verano, época con altos picos de incidencia del zika; en ellos participaron siete mil atletas, ocho mil voluntarios y dos mil empleados, sin que alguno presentara signos de contagio.
Asimismo, aseguró que se mantiene un total apego a las indicaciones de la Organización Mundial de la Salud y a las recomendaciones del Comité Olímpico Internacional.
Mientras que las autoridades locales continúan con las inspecciones diarias en las instalaciones, dando indicaciones precisas a los atletas y asistentes.
En un artículo publicado en el portal oficial de Río 2016, Joao Grangeiro retomó algunos trabajos con los cuales se fortalece la tranquilidad en territorio brasileño respecto al tema de salud, mismo que incluso hizo que algunos deportistas pusieran en suspenso su asistencia a los Juegos Olímpicos.
Recordó algunos datos difundidos por la revista "The Lancet", en los cuales se afirmó que por cada millón de turistas que llegan a Río de Janeiro, 1.8 personas es infectada; por lo tanto, la ciudad tendrá una persona infectada de entre los 500 mil visitantes esperados para estas competencias.