San Roque es el patrono del pueblo de Perrones, partido de Guediño, en la provincia de Altamesa.
En el retablo mayor del templo parroquial hay un cuadro del santo acompañado del perro que milagrosamente le llevaba cada día un pan a su retiro del desierto.
No es muy bueno ese cuadro, hay que reconocerlo. Tan malo es que los lugareños tuvieron que ponerle cartelas explicativas. Una dice: "Éste es San Roque". La otra: "Éste es el perro".
Se cuenta que la poca fortuna de su cuadro hizo que el pintor muriera de tristeza. Los vecinos cuentan que cuando el artista llegó al Cielo el perro se le echó encima y lo mordió, sin que San Roque hiciera nada para detenerlo.
Yo pienso que las imágenes inspiradas por la fe hay que verlas con los ojos del alma, no con los del cuerpo. De cualquier modo cuando le rezo al santo me fijo bien para no rezarle al perro. Le fe debe también tomar sus precauciones.
¡Hasta mañana!
