Murray había escalado a la cima el 7 de noviembre tras lograr su octavo título del año en el Masters de París. (AP)
Sin lugar a dudas, Andy Murray será el número uno del mundo en el que resta del año.
El campeón de Wimbledon necesitaba ganar el último partido de la temporada para asegurar quedar en la cima. Y lo logró de una manera demasiado cómoda.
Murray conquistó ayer por primera vez el título de la Copa Masters, imponiéndose 6-3, 6-4 ante Novak Djokovic.
"Voy a intentar de permanecer ahí lo más que se pueda", dijo Murray, quien desplazó a Djokovic, quien culminó el año inmerso en una racha de 24 victorias. "Fue un esfuerzo descomunal estos últimos cinco, seis meses, para poder alcanzarlo.
"Soy consciente que será extremadamente difícil, porque he tenido un año estupendo este año", añadió. "La diferencia al final fue un solo partido".
Murray desplazó a Djokovic de la cima del ranking de la ATP hace dos semanas en París, pero el serbio tenía al alcance de recuperar la condición de número uno con un triunfo el domingo en la O2 Arena.
Y Murray se presentaba vulnerable de cara a la final, luego que el sábado debió exigirse tres sets para superar a Milos Raonic en las semifinales.
El escocés arrancó el partido con un par de doble faltas, pero Djokovic no tardó en tener problemas con su saque. El serbio perdió el saque dos veces en el primer set y dos veces más en el segundo, apilando una numerosa cantidad de errores no forzados.
Habitualmente, preciso con sus devoluciones, Djokovic empezó a fallar golpes demasiado fáciles y acabó el partido con la friolera de 30 errores no forzados y sólo 13 winners.
"No tenía posibilidades de ganar este partido", reconoció Djokovic. "Fue algo que fue evidente para todos desde el principio. Fue superior en todos los sentidos".
En el primer set, Djokovic mandó afuera lo que era un smash de rutina. Y en el segundo, depositó en la red una volea de fácil ejecución.
Así transcurrió el partido para el campeón de 12 grandes, que intentaba empatar un récord con un sexto título en el torneo de fin de temporada y acabar el año como el número uno por quinta ocasión.
En cambio, Murray registró 15 errores no forzados con 13 winners para vencer a Djokovic por primera vez en una pista bajo techo tras cuatro derrotas.
Murray es el primer jugador que no es Djokovic, Roger Federer o Rafael Nadal que cierra el año en la cima del ranking desde Andy Roddick en 2003.