(Tercera y última parte)
En 1950, sería su última gira por los Estados Unidos y Canadá. A su regreso a la Ciudad de México, se hace acompañar por la Orquesta de Gonzalo Cervera, con quien hace una magnífica mancuerna artística. En esta fecha, Peggy Satanon, representante de grandes artistas, "descubrió" a Cháyres durante un recital que ofrecía en el Palacio de Bellas Artes, esa relación del cantante y la ejecutiva culminó en un afortunado matrimonio en 1950.
El 16 de marzo de 1951, el Gitano lerdense sufre un fatal accidente automovilístico en la carretera a Laredo con rumbo a Pachuca, Hidalgo, perdiendo la vida su señora madre. Este lamentable golpe le impidió continuar cantando en un período de más de diez años. Su regreso a los medios artísticos fue en los años de 1968 y 1969, pero ya en la televisión en el programa La hora de Paco Malgesto y en El álbum de oro de la W. Su última aparición la tiene el 6 de noviembre de 1970 en el programa de televisión 24 horas, conducido por Jacobo.
Después, un infarto minó sus fuerzas, que no pudo resistir, y siendo las 5:30 horas del 29 de junio de 1971, hace precisamente 45 años, "El Gitano de México", Néstor Mesta Cháyres, fallece en la Ciudad de México a la edad de 63 años.
Su obra la dejó impresa en discos fonográficos, siendo muy numerosa, por tanto él, como muchos otros, seguirá viviendo en el recuerdo de las actuales generaciones. Un artista de estas alturas es muy difícil de encontrar en el arte musical mexicano, como gran intérprete de la canción española y de la música romántica mexicana.
Es importante agregar esta anécdota, sucedida en 1948, en relación a nuestro recordado lerdense y la gran compositora María Greever: "Sánchez García cuenta que al escuchar la interpretación de Nestor Mesta Cháyres de su canción Vida mía en el Carnegie, May se emocionó tanto que le provocó la hemorragia cerebral. No obstante, siguió con su vida de compositora.
Aun cuando hicimos más que lo imposible por agregar nuevos datos a los ya conocidos en relación a la vida familiar y artística de este famoso lagunero duranguense, no encontramos nada nuevo que no se conociera; sin embargo, quedan pendientes muchos datos más, tales como los siguientes: Qué fue de la familia inmediata de Néstor: de su padre; sabemos que su madre murió en un accidente; sin embargo, se desconoce que fue de sus seis hermanos; se menciona que contrajo matrimonio con Peggy Satanon, pero se desconoce si hubo descendencia, de ser así, podemos elucubrar que algunos de ellos pudieran aún vivir en la actualidad. Se conoce que falleció en la Ciudad de México, no obstante, al comunicarme al Panteón Español que en aquella época de la década de los setenta y desde muchas décadas anteriores, era el más solicitado para las inhumaciones sobre todo de los personajes que hicieron historia. Otra de las interrogantes: ¿Actuaría en alguna ocasión en su estado natal? En él, ya existían dos teatros a la altura de su categoría, entre ellos el Ricardo Castro. Y algo más: ¿Volvería a visitar la tierra que lo vio nacer? Cómo me gustaría que llegáramos a conocer el sitio donde descansan sus restos y que tanto el Gobierno del Estado de Durango, o bien el Municipio de Ciudad Lerdo, llevaran a cabo los trámites necesarios para que sus restos llegaran, bien a la Rotonda de los Hombres y Mujeres distinguidos del Estado de Durango, ubicado en el Panteón de Oriente, o bien, algo mucho mejor, que llegaran a la población que lo vio nacer tambien, que el estado de Durango en colaboración con Ciudad Jardín, inmortalizaran su recuerdo con una monumental escultura a cuerpo entero que se colocara en la Plaza Principal de este hermoso rincón lagunero que lo vio nacer hace ya más de un siglo, independientemente de que su nombre lo llevara una institución educativa y a una gran avenida, calzada o bulevard se le asignara su nombre.
En fin, hay que revivir a Néstor Mesta Cháyes en el terruño que lo vio nacer. ¡Que así sea!
Leonelrodriguez42@ live.com.mx
