Una pequeña jugadora se destacó en el equipo del Lorito Jiménez, primero en el campo y después defendiendo el arco. (Jesús Galindo)
No es la primera vez que sucede en la Copa Santos Peñoles. Varios de los equipos participantes, cuentan entre sus filas con niñas y jovencitas en su plantel, que en algunos casos, juegan un papel fundamental en la competencia.
El año pasado se abrió la categoría femenil, teniéndose una gran respuesta, no solamente de equipos locales, sino de foráneos, que brindaron un excelente nivel futbolístico.
Las Leonas del Instituto Británico se quedaron con el campeonato, aunque para este año, por cuestión de logística no pudieron defender, ya que no se abrió la categoría femenil.
Pero en las 10 categorías en la rama varonil, no hay impedimento para que las niñas tomen parte, incluso la Academia Santos de Cuauhtémoc, Chihuahua, cuenta entre sus filas con dos jovencitas en la Sub-12.
Jatziri Ramos juega con el conjunto norteño como guardameta, ya que es una posición que le gusta desempeñar. En la jornada del jueves, se dio el lujo de atajar un penal, que lo celebraron en grande sus compañeros.
"Me gusta esa posición, no me dan miedo los balonazos, pero es padre jugar porque todos son mis amigos" dijo la tímida guardameta chihuahuense, antes de degustar un suculento hot dog con salchicha polaca.
Entre las risas nerviosas de sus compañeros, surgió la figura de una espigada niña de nombre Jazive Rojo, quien también juega con el equipo albiverde de Cuauhtémoc, en la posición de defensa central.
Uno de sus compañeros de equipo, Jorge Mendoza, dijo que al igual que en la ciudad que se ubica al pie de la Sierra Madre Occidental, también juegan contra puros niños y jovencitos, por lo que tanto Jatziri como Jazive, están acostumbradas a jugar contra ellas.
Otro de los equipos que cuenta con una damita en su plantel, es el Centro de Formación "Lorito" Jiménez con sede en Irapuato, Guanajuato. Ella es Natalia Muñoz González.
La peculiaridad de Natalia, es que ella es oriunda de Salamanca y es la máxima romperredes en la liga local de la localidad guanajuatense, por lo que reforzó al equipo fresero para la competencia.
Su padre que la apoyaba con gritos de aliento desde la tribuna comentó: "Ella es la goleadora de Salamanca, la seleccionaron y viene como refuerzo, le ha ido bien, esperemos que siga así".
Natalia a pesar de jugar como delantera o volante ofensiva, con el equipo de Walter Jiménez, se desempeña como defensora, incluso tiene facultades de portera, por lo que también en la Copa Santos Peñoles, ya jugó en esa posición.
Escuadras como la Academia Santos de Reynosa, Tamaulipas, Búfalos FC, FIFFUT de Culiacán, Sinaloa, entre otros, cuentan con niñas y jovencitas en sus equipos durante el presente certamen.
UNA SANA CONVIVENCIA
Como en cualquier competencia con varios días de duración, la convivencia y la unión entre los integrantes de los equipos, es vital para un mejor rendimiento en la cancha, sobre todo, buscando resultados positivos.
Los equipos foráneos, pasan horas y horas juntos, tanto antes como después de los partidos, incluso comparten el pan y la sal, ya que de esta manera, fomentan aún más el compañerismo entre ellos.
Aunque no tengan los mismos gustos en el paladar, la mayoría de los jugadores se reúnen en el comedor para disfrutar de una merecida comida. El menú va desde hamburguesas hasta las típicas gorditas laguneras, pasando por lonches, sándwiches y tacos.
"La verdad es una gran fiesta familiar, sobre todo por la convivencia de muchos equipos de fuera, aunque también hay presencia de laguneros, que aprovechan las pausas para visitarnos" dijo Ulises Villarreal, quien tiene una de las concesionarias de comida.
Agregó que se ha tenido excelente respuesta y tanto a él, como al resto de sus compañeros, no se quejan por el elevado consumo de los asistentes al TSM, esperando que se incremente al doble durante el fin de semana.