El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva aseguró ayer "que no hay alma viva" más honesta que él en Brasil y volvió a calificar de "golpe explícito" las tramitación del juicio político con miras a la destitución de su sucesora, Dilma Rousseff. "Si hay una cosa de la que me siento orgulloso en este país es que no hay un alma viva más honesta que yo. Ni dentro de la Policía Federal, ni dentro del ministerio, ni dentro de la Iglesia católica, ni dentro de la Iglesia evangélica", sostuvo Lula durante un encuentro con blogueros en Sao Paulo. El exmandatario, que gobernó Brasil entre 2003 y 2010, ha sido citado por varios delatores detenidos a raíz del gigantesco escándalo de corrupción.