Permitir la llegada de nuevas empresas que vendan los combustibles en México como lo anunció el presidente Enrique Peña Nieto, no será una garantía de la reducción considerable de costos, al no dejar de lado el cobro de impuestos que tienen éstos.
El presidente de la Confederación de Pequeños Productores Rurales de la Comarca Lagunera, Baudilio Rodríguez Abusaíd, comentó que la situación, tanto para la gente del campo como la ciudadanía será prácticamente la misma, ya que a estos combustibles se les sigue agregando un impuesto muy alto, lo que hace que el costo final sea casi el mismo.
Dijo que por decreto oficial, desde el pasado 29 de diciembre se había acordado que los productores agrícolas quedarían exentos del cobro de este impuesto, sin embargo, asegura que es otra de las disposiciones que no se han cumplido para el sector agropecuario.
Una vez más, solicitan la intervención de las autoridades correspondientes para revisar este tema con la Secretaría de Hacienda y la de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa).
Dijo que cada situación se está sumando a la crisis de los productores, ya que son quienes más impuestos pagan por el diésel, además del IVA y otros más, mientras lo que genera el productor es lo que más barato se vende y lo que está desprotegido.
"De esta misma manera deberían de aplicar impuestos y más altos, a otros productos que llegan de importación a México y que además son de pésima calidad y perjudican al mercado y productor local como el ejemplo de los lácteos, sobre todo la leche en polvo y la carne, pero no lo hacen ", apuntó el dirigente campesino.
Rodríguez Abusaíd, dijo que esta situación seguirá elevando la crisis del sector campesino que está muy afectado.
Además, destacó que esto también terminará por provocar que la canasta básica suba considerablemente.