No vayas de vacaciones al hospital

Las vacaciones de verano están a la “vuelta de la esquina” para los pequeños de la casa y para familias enteras.

Para aprovechar al máximo este tiempo de descanso, los médicos emiten una serie de recomendaciones para evitar que niños y adultos, terminen de vacacionar en la sala de urgencias de un hospital o con padecimientos aún más serios.

Cuidado con el sol

Aunque su uso se recomienda en cualquier época del año, en esta temporada de calor, es necesario el uso del protector solar para evitar daños severos en la piel, que pudieran causar cáncer.

Manuel Velasco, médico pediatra y titular de la Dirección de Salud Municipal en Torreón, explicó que su aplicación debe hacerse 20 minutos antes de salir de casa. Recomienda sobre todo el uso de bloqueador solar de nivel 50 o superior, más que nada en los niños.

La cantidad que se recomienda por cada extremidad son cinco mililitros, que equivalen a una cucharada cafetera, y en la cara media cucharada para tener una protección más completa. El producto deberá renovarse cada cuatro horas, porque después de ese tiempo ya no tendrá el mismo efecto protector.

Los niños no deberán exponerse a los intensos rayos violeta, que se registran desde las 11 de la mañana a 5 de la tarde, por lo que deberán evitar actividades al exterior.

Pero cuando es inevitable que los pequeños estén expuesto a los rayos del sol, sobre todo cuando se vacaciona en alguna playa, se pide que usen ropa clara y un sombrero, para evitar al máximo el daño de la luz ultavioleta.

A los adultos mayores, se recomienda además de todo lo mencionado, el uso de lentes con protector UV, a fin de evitar la formación de cataratas en los ojos. Sobre todo a las personas que por motivos de trabajo, deben estar expuestos a la luz solar.

El médico recalca que estas medidas no deben ser tomadas a la ligera, sobre todo porque la piel “tiene memoria”.

“Desafortunadamente cada exposición se va a sumar cada día, entonces va a ocasionar daño en las células de la piel que llevará a una degeneración que provocará daños importantes, que a la larga pueden generar un melanoma y terminar con la vida de una persona.

Sin embargo, también pide no exagerar en evitar al máximo los rayos del sol, porque puede provocar raquitismo, que es una enfermedad producida por la falta de calcio, fósforo y una mala alimentación, que se caracteriza por deformaciones de los huesos que se doblan con facilidad, además de debilidad del estado general.

“La luz solar es necesaria para la fabricación de la vitamina D necesaria para el desarrollo de los huesos. Si evitamos que se expongan a la luz del sol, vamos a tener un daño a nivel de los huesos; el sol es necesario, pero bien dosificado”, aclaró el especialista

Si ya existen daños

Cuando el daño existe, es necesario observar la piel y sus cambios. Si aparece un nuevo lunar es necesario ver si es redondeado, de tal manera que si se imagina partido por la mitad debe ser simétrico, luego la superficie debe tiene un mismo color, esos datos dirán que seguramente es benigno. “Si existen dos colores en el mismo lugar, en la superficie de un color más claro, si no está asimétrico también se sospecha de cáncer, si los bordes son bien definidos. Casos agregados es si empieza a dar comezón o que sangra también es sospechoso”, comentó el médico.

En casos en los que ya existe un daños en la piel y apareció un lunar, es necesario acudir con el médico, para una revisión para ver si es benigno o no.

“Recomendamos una buena nutrición, recordemos que la falta de vitaminas hará que la piel sea delicada, entonces es fundamental el consumo de frutas y verduras principalmente. Y para los niños, por la mañana recordar a las mamás que les hagan huevos para tener una piel con más defensas”.

No te olvides del agua

Otro problema con el sol es la deshidratación, hay que recordar que en los extremos de la vida, los niños y los adultos mayores son los más vulnerables.

En los menores, aparte de la deshidratación pueden desarrollar enfermedades gastrointestinales caracterizadas por vómitos, diarrea y mucha fiebre.

Lo que se debe vigilar es que los bebés de más de un año estén orinando, si el pequeño deja de hacerlo, tiene los ojos hundidos así como la parte de la cabeza que se conoce como mollera, se debe de acudir al médico inmediatamente.

En caso de presentarse un golpe de calor hay que suministrar Suero Oral y colocar un pedazo de hielo amarrado con una toalla en la frente para bajar la temperatura y acudir al médico inmediatamente.

Por último, el especialista señala que hay que evitar la automedicación, ya que esto puede llegar a agravar la enfermedad y poner en riesgo al paciente.

Picaduras de insectos

las picaduras de insectos también aumentan en la temporada de calor, en esta situación primero hay que identificar qué bicho es. Si es insecto tipo avispa o abeja es necesario retirar de inmediato el aguijón, aplicar hielo y revisar la lesión. Si ésta se pone como si fuera una quemadura o con una ampolla llena de agua pudiera ser una araña tipo violinista o un bicho tóxico, por lo que se deberá acudir con el médico para que recete algún antibiótico local.

Hay que recordar que los daños por la luz ultravioleta son más intensos debido a la destrucción de la capa de ozono, eso explica por qué los daños son más severos”.

Manuel Velasco,

médico pediatra y titular de la Dirección de Salud Municipal en Torreón