Con la renuncia, el obispo atiende al Derecho Canónico que en cano 401 párrafo 1, pide a los obispos que habiendo cumplido 75 años presenten su renuncia de su oficio al Papa. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Hoy, a 24 horas de haber cumplido 75 años de edad, el obispo de Torreón, José Guadalupe Galván Galindo, envió su renuncia a la Nunciatura Apostólica para que ésta a su vez la haga llegar al Papa Francisco. En tanto no sea aceptada por el Santo Padre, monseñor seguirá al frente de la Diócesis de Torreón.
Entrevistado en su hogar, el obispo de Torreón desde hace casi 16 años, informó que esta mañana vía Estafeta hizo llegar la carta, la cual fue breve y que será enviada con la Valija Diplomática que envía la Nunciatura al Vaticano.
Con la renuncia, el obispo atiende al Derecho Canónico que en cano 401 párrafo 1, pide a los obispos que habiendo cumplido 75 años presenten su renuncia de su oficio al Papa, figura que nació en el Concilio Vaticano II, ya que anteriormente los obispos seguían al frente de sus Diócesis hasta la hora de su muerte.
Aunque secreta, monseñor reveló parte de la carta que envió a un día de haber cumplido sus 75 años edad. “Habiendo cumplido mis 75 años de acuerdo al derecho canónico Cano 401 párrafo 1 presento mi renuncia como obispo de la Diócesis de Torreón. Me pongo en sus manos me encomiendo a su oración y espero su respuesta”.
Es el primer paso, porque esa renuncia no tiene ningún valor hasta que sea aceptada por el Papa Francisco, “los trámites normales es que por medio de la Nunciatura apostólica yo le envío esa carta al Papa, al recibirla, los comentaristas dicen que el Papa no tiene obligación de aceptarla, ni yo tengo derecho de exigirle que me la acepte. Por lo tanto el Papa según las circunstancias del lugar y de las personas, él toma su decisión. Y hay que esperar porque el papa lo hace público hasta el día que tenga el nombre del sucesor”, explicó Galván.
