Concurrida. El pintor mexicano Eric Pérez contó con una buena asistencia a su exposición.
Con una conferencia introductoria, donde el artista mexicano Eric Pérez explicó su relación con el paisaje y su entorno, el mismo con el que dialoga y ofrece como resultado el poema visual titulado "Anáhuac" se inauguró anoche en el museo Arocena la exposición "Elegía de Anáhuac. Pintura de Eric Pérez".
Durante la charla en el auditorio del museo, el artista plástico explicó algunos detalles de la forma en la que convergen en su obra, elementos naturales como las olas, las montañas y esas metáforas de los ciclos de la geología que él llevó a la pintura con un acertado realismo.
Obra en la que también contrasta el paisaje urbano, donde las estructuras de un edificio en construcción, los coches y el asfalto, son bañadas por un sol que a simple vista parece diferente al que ilumina lo natural.
"Por ejemplo en toda mi serie del 2011, estuve trabajando en las montañas, el valle del Anáhuac, a partir de varias experiencias e investigaciones, obra donde fui ubicando varios personajes que en ella aparecen".
Series que incluso abordan temas como la expropiación petrolera, sin llegar a convertirse en un panfleto, sino más bien una representación a partir de la lectura que el autor hace de los diarios de Lázaro Cárdenas, detalles que platicó el propio Eric en el auditorio del museo durante la charla previa que ofreció.
Por su parte Nina Menocal, directora de la galería que presenta la muestra en coordinación con el Arocena, destacó el nivel intelectual del invitado, un investigador que tiene la capacidad de dar una lectura actual de México a través de su obra.
La exposición tendrá una duración de tres meses y hace parte de las actividades por el décimo aniversario del Museo Arocena.
Un testimonio plástico
"Este proyecto consta de escenas surgidas de una reflexión personal sobre México. La perspectiva más importante tiene que ver con una fijación del espacio: el valle del Anáhuac, y una exploración permanente de las múltiples temporalidades superpuestas que nos constituyen como nación.
Se trata de cuadros en los que lo histórico y lo mítico se funden en imágenes sintéticas, casi emblemáticas. Hablar de ellas como jeroglíficos tiene sentido en la medida en que se constituyen como misterios", comenta el propio Eric Pérez, sobre la muestra que podrá ser visitada en la sala de temporales del museo.
