Si lo que quieres es deshacerte de tu cara cansada de forma inmediata, deberás utilizar el maquillaje con moderación. La base adecuada y el iluminador facial, son la clave para devolverte el brillo que tanto necesitas.
Seguramente en alguna ocasión te ha sucedido que estás a punto de maquillarte pero nada resulta como esperabas, la crema hidratante parece no haber tenido efecto, el maquillaje no es capaz de esconder las marcas o manchas de tu cara, y por si eso fuera poco, las ojeras se niegan a desaparecer; todas estas son señales de un rostro cansado.
Las tensiones, el estrés y la falta de sueño, son algunos de los múltiples factores que tienen repercusiones en nuestro aspecto, particularmente en el rostro. Si lo que quieres es volver a tener esa imagen fresca, rejuvenecida y con luz, pon atención en los siguientes consejos que podrás incluir en tu rutina de belleza diaria.
Comienza por los ojos
Los párpados hinchados pueden ser un síntoma de varios padecimientos, en este caso, las bolsas aparecen en las primeras horas de la mañana debido a una acumulación de líquidos en el rostro, por dormir muy poco o más de ocho horas.
Para resolverlo, es aconsejable enfriar suero para ojos por algunos minutos en el refrigerador; el frio es un vasoconstrictor que calmará la inflamación de forma inmediata. Se debe de aplicar suavemente en el área debajo de los ojos, donde suelen aparecer las bolsas, y se puede volver a aplicar a lo largo del día, hasta disminuir la inflamación.
Otra forma de prevenir la hinchazón, es elevando la cabeza con una almohada adicional, que tiene como propósito minimizar la acumulación de fluidos matutina.
En caso de que el problema con los ojos sea el enrojecimiento, la primera alternativa es aplicar gotas refrescantes, pero también puedes hacer uso del maquillaje en color hueso para neutralizar el color de la parte interna de las pestañas.
Las múltiples soluciones para tu piel
Una piel cansada va a lucir reseca, con marcas, e inclusive con una coloración pálida. Para combatir esta problemática, lo primero que se tiene que hacer es asegurar su correcta hidratación; ya sea internamente con el consumo de agua, o externamente con el uso de cremas hidratantes.
Otra estrategia efectiva son las mascarillas relajantes, que están hechas para restaurar y devolverle vida a tu piel. Puedes elaborarlas desde la comodidad de tu casa con ingredientes como aguacate, pepino o mandarina; o conseguirlas en alguna tienda especializada en productos de belleza.
No olvides que la exfoliación es una parte esencial para la renovación de tu piel, así que realízala una vez por semana, con productos que no vayan a tener el efecto contrario de resecar tu piel.
Y para las insistentes ojeras, basta con una crema para ojos que contenga cafeína. Una gota por la mañana y otra por la noche, son suficientes para que los vasos sanguíneos se estrechen, y sólo te quede disfrazar el resto con un poco de maquillaje del color de tu piel.
En cuanto a la falta de color, se aconseja aplicar por la mañana y en la noche, un humectante con ácidos alfa hidróxidos; compuesto que contienen ciertos productos de belleza, y que esa indicado para romper los enlaces entre las células muertas y la piel, lo que resulta en un cutis fresco, sano y con apariencia jovial.
De igual forma se puede promover la hidratación con el empleo de ciertos hábitos antes de dormir como: lavar la cara para eliminar los residuos del día, dormir con un humidificador para compensar el aire seco de la noche, y masajear el rostro, sobre todo en las zonas propensas a la acumulación de tensión.
Apóyate de la gimnasia facial
¿Qué pensarías si te dijeran que al hacer una mueca estás ejercitando los músculos de tu rostro? Exactamente eso es de lo que se trata la gimnasia facial, la cual promete darte una piel más tersa y radiante por medio de sencillos ejercicios.
Básicamente se trata de movimientos relajantes que te ayudan a evitar el estrés, a olvidarte de los problemas de una tez cansada y a mejorar tanto la oxigenación, como la circulación de la cara.
Para tensar y fortalecer tus músculos sólo hace falta seguir una rutina sencilla de ejercicios que comienza con un calentamiento. En él, se realiza un pequeño masaje sobre la cara dando suaves golpes con la yema de los dedos y pequeños pellizcos.
Las áreas en las que se pone mayor énfasis son la barbilla, la papada, las mejillas, la zona de la boca, el contorno de ojos y la frente.
Es recomendable ejercitarse antes o después del tiempo que se dedica para los cuidados de la piel, por 5 o 10 minutos y con repeticiones.
La gimnasia facial no es una alternativa para los tratamientos estéticos como el botox y los rellenos, pero sí repercute significativamente en la imagen del rostro.
Fuentes: www.diariofemenino.com, womenshealthlatam.com, www.vichy.es, www.enfemenino.com
