Una persona con uno, dos, tres o sin importar el número de tatuajes que tenga, puede ser un donador, siempre y cuando, el más reciente haya sido un año atrás.
Ante la falta de donantes altruistas y en medio de su desesperación, Fabiola Flores ha pagado desde 200 hasta 500 pesos a cada donante de sangre, para obtener las unidades que su pequeño ha llegado a requerir. Para obtener el dinero, dice que hasta limosna ha pedido con tal de completar el "precio".
De acuerdo con Jesús Gerardo Muñiz Hugarte, médico pediatra y hematólogo en el Hospital Infantil Universitario de Torreón, ni en la región ni en el país, se tiene una cultura de la donación altruista, situación que preocupa porque siempre existen pacientes en las instituciones de salud necesitados de una transfusión y que por desgracia muchos pierden la vida en la espera de sangre.
"Nos preocupamos por donar cuando tenemos el problema, pero en realidad no tenemos una cultura que diga voy a ir a donar para el que requiera, nada más cuando tengo el problema, nace la necesidad", dijo el médico.
Pese a que la comercialización de sangre está prohibida, se da. Como en el caso de Fabiola, que se ha visto obligada a pagar por su sangre a personas desconocidas.
"La persona que quiere donar, le cobra a uno un monto y uno con la desesperación hasta pide limosna para sacar el dinero para completar".
Es a través de las redes sociales como la madre desesperada lanza la solicitud de ayuda, y puede pasar hasta una semana para obtener respuesta.
Dice que el obstáculo que debe enfrentar es la indiferencia de la gente y su ignorancia, al desconocer su tipo de sangre y porque pueden donar sin importar su tipo de sangre, "se puede cambiar, muchas veces es para reponer la sangre, para que el banco no se quede solo".
Ante este escenario, Fabiola lanza un mensaje "que donen sangre porque por medio de ella pueden salvar vidas".
Mitos
Una persona con uno, dos, tres o sin importar el número de tatuajes que tenga, puede ser un donador, siempre y cuando, el más reciente haya sido un año atrás.
