Freno. Las obras del puente Lázaro Cárdenas-Falcón sobre el río Nazas se encuentran abandonadas en Gómez Palacio. (MA. ELENA HOLGUÍN)
Los trabajos de la segunda etapa de construcción del puente vehicular Lázaro Cárdenas-Falcón sobre el lecho seco del río Nazas se encuentran detenidos desde principios de marzo por el lado de Gómez Palacio.
La obra, que arrancó en octubre de 2014 y que construyen los gobiernos de Coahuila y Durango, cada uno por su lado, con dinero del fondo metropolitano, hasta enero pasado llevaba un avance del 30 por ciento en su segunda etapa.
Vecinos de los alrededores entrevistados por El Siglo de Torreón aseguran que desde los primeros días del presente mes vieron que trabajadores y maquinaria se retiraron del sitio de la obra y hasta ayer no se habían reincorporado, por lo que la construcción se observa abandonada.
Para esta segunda etapa, el gobierno de Durango dispone de un presupuesto por 30 millones de pesos del Fondo Metropolitano de 2015, que junto con los 70 millones que serán ejercidos por el de Coahuila, servirán para terminar la obra al cien por ciento y con ello, recuperar la conectividad entre las ciudades de Torreón y Gómez Palacio, interrumpida en ese punto desde el año 2008.
Ya en una primera etapa se aprobaron 38 millones de pesos que se ejercieron en el inicio de los trabajos en la parte que corresponde a Gómez Palacio.
En febrero pasado, la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas del Estado (Secope), encargada del proyecto, dio a conocer que se tenía la intención de terminar en este marzo todas las obras en proceso con recursos del Fondo Metropolitano de 2015.
Los trabajos de la segunda etapa abarcan la colocación de columnas, además de la cimentación y todo el armado de acero.
El puente vehicular tendrá una longitud de 350 metros y 28 de ancho, contará con seis carriles para circular en dos sentidos.
En total se invertirán 140 millones de pesos en la obra, puesto que los otros 70 millones serán ejercidos por el gobierno de Coahuila, del lado de Torreón, donde los trabajos siguen su marcha, al contrario que en Durango, donde las autoridades no dieron a conocer la causa de la suspensión de la obra.