Perros hay en todas partes, por eso nunca está de más saber cómo salir bien librado de un encuentro con el mejor amigo del hombre.
Siempre mantén una distancia prudente entre tú y un perro, aún con correa.
Si quieres acercarte, pregúntale al dueño si es conveniente.
No te acerques a un perro cuando come, gruñe, duerme, ladre o cuide a sus crías.
Jamás lo mires fijamente a los ojos.
No trates de acariciarle la cabeza, sobre todo si es un perro desconocido.
Aléjate lentamente y sin aspavientos cuando te gruña y te vea fijamente.
Trata de que haya algo entre tú y el animal, como un árbol o una banca.
Si lo notas furioso, háblale suavemente para calmarlo; dile algo como "buen perro".
Trata de salir lentamente de su territorio
Si las leyes locales lo permiten, en caso de ataque rocíale gas pimienta.
Si se te abalanza trata de poner algo entre tú y la boca del perro; un paraguas o una mochila pueden servir.
No trates de correr para huir.
Si ya sabes que en tu camino hay animales violentos, cambia de ruta.
Muchos perros son curiosos con las personas extrañas, no les temas. Ignóralos funciona.
Amaga con aventarle algo si lo notas sospechoso.
Si te ataca colócate en posición fetal y protege cara, cuello y cabeza.
Reporta a los perros agresivos a la policía.
Tenle precaución a todas las razas de perros, sobre todo al Bull Terrier, Pit Bull Rottweiler
Recuerda. "No existen malos perros, sino malos amos".
pequenas_especies@hotmail.com