Borge ofreció garantías a los inversionistas para construir el desarrollo que contemplaba 722 viviendas, 20 naves comerciales y 3 mil locales, sobre terrenos forestales ubicados en el predio El Tucán, localizado en el Municipio de Benito Juárez. Finalmente, fue clausurado en definitiva por la Profepa. (ARCHIVO)
Conflictos como el de la isla Holbox, o el caso Malecón Tajamar, son algunos ejemplos de daños al ecosistema que en Quintana Roo durante el Gobierno de Roberto Borge, y que fueron ignorados por autoridades de medio ambiente de su administración.
Gustavo Alanís, director general del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), señaló que la política ambiental nunca fue prioridad en el sexenio estatal que está por terminar.
"El medio ambiente en esta Administración nunca fue una prioridad y es una contradicción porque Quintana Roo está rodeado de naturaleza", aseguró.
En el caso del proyecto Dragon Mart, en Cancún, el proyecto inició desde el mandato de su antecesor Félix González.
Sin embargo, Borge ofreció garantías a los inversionistas para construir el desarrollo que contemplaba 722 viviendas, 20 naves comerciales y 3 mil locales, sobre terrenos forestales ubicados en el predio El Tucán, localizado en el Municipio de Benito Juárez. Finalmente, fue clausurado en definitiva por la Profepa.
En otro caso, la proliferación de prestadores de servicios turísticos en la Bahía de Akumal, respaldada por autorizaciones que contaron con el aval del mandatario, provocó una problemática ambiental de sobrecarga en la zona y la cual afectó principalmente a las tortugas marinas.
Para contener la degradación de los recursos naturales, la Profepa anunció en mayo un plan de intervención que actualmente continúa en curso para evitar una mayor afectación a las especies de alto valor ecológico.
El gobernador heredará al próximo Gobierno la controversia suscitada en el Malecón Tajamar.
A un año de que organizaciones ambientales iniciaran la defensa de ese ecosistema, aún continúa vigentes juicios ante instancias judiciales. También la nueva administración deberá de estar pendiente de los proyectos turísticos contrarios al Programa de Ordenamiento Ecológico del Corredor Cancún-Tulum.
