Análisis. De izquierda a derecha: Cameron; Obama; Ángela Merkel; Matteo Renzi y François Hollande en reunión.
Evocando la historia y haciendo un llamado a la solidaridad, el presidente Barack Obama anunció ayer lunes el despliegue de 250 efectivos en Siria con el objetivo de mantener el impulso de la campaña militar contra el grupo Estado Islámico. Además, el mandatario presionó a sus aliados europeos a igualar a Estados Unidos y hagan sus propias contribuciones.
El anuncio de los soldados estadounidenses, que cerró una gira de seis días por Oriente Medio y Europa, refleja un compromiso militar estadounidense constante y más profundo a pesar de que Obama ha manifestado su renuencia a involucrarse más en otro conflicto en la región. Mientras Obama anunciaba el despliegue, también manifestaba su deseo de que Estados Unidos comparta la carga.
Obama habló de la lucha contra el Estado Islámico con el primer ministro británico David Cameron, la canciller alemana Ángela Merkel, el presidente francés François Hollande y el primer ministro italiano Matteo Renzi.
El mandatario estadounidense anunció formalmente el despliegue de militares en un discurso sobre unión europea y cooperación transatlántica, un tema constante en su viaje. En Alemania evocó la historia del continente uniéndose para derrotar al prejuicio y levantarse de las "ruinas de la Segunda Guerra Mundial".
"No nos equivoquemos. Estos terroristas aprenderán las mismas lecciones como lo han hecho antes otros y que es tu odio no se compara con nuestras naciones unidas en la defensa de nuestra forma de vida".