Logro. Eduardo Hernández, director de Planetarium Torreón, compartió su experiencia regional.
Del 20 al 22 de enero, se lleva a cabo en la ciudad de México la Reunión Internacional "Derecho a los cielos oscuros" organizada por la oficina de UNESCO en México, Conacyt, UNAM, AMC y Fccyt. Durante tres días especialistas de diversas disciplinas conversan sobre el derecho a los cielos oscuros y su importancia como valor cultural y científico.
En el segmento "Sensibilizar y educar a través de la divulgación de la astronomía", Eduardo Hernandez, director de Planetarium Torreón y presidente de la Asociación Mexicana de Planetarios, fue invitado a participar con la charla "Pensar en un Planetario, Planetarium Torreón como un caso de estudio" por su vinculación con la comunidad y la importancia de la concientización de una correcta iluminación.
Durante su participación, Hernández también habló sobre la reconversión tecnológica del alumbrado de Torreón la cual ha permitido reducir de manera significativa la contaminación lumínica, además de los beneficios de la reducción de consumo de energía.
Planetarium Torreón cuenta actualmente con los 2 mejores observatorios astronómicos del país abiertos al público, con un telescopio de medio metro y un refractor de 25 centímetros apocromático, ambos robóticos.
Al estar instalados en el Bosque Urbano, un parque cuya iluminación está correctamente dirigida hacia abajo y cercano al aeropuerto, es un lugar excelente para sensibilizar al público sobre los beneficios de una correcta iluminación aplicada en este espacio.
"Proteger nuestros cielos para las futuras generaciones y para poder seguir observando el universo es la finalidad de este congreso. Al final de la reunión, se emitirá una declaratoria de intenciones para preservar nuestros cielos oscuros", comentó el director del complejo.
Un dato importante
La contaminación lumínica es la luz mal aprovechada que se dispersa por la atmósfera y vuelve el cielo brillante, reduciendo la capacidad de ver las estrellas. Pero este tipo de contaminación no sólo afecta el observar el cielo, genera un excesivo consumo de energía eléctrica por lo que hay que producir más energía con su contraparte de contaminación al quemar más combustibles fósiles.
Cambia los ritmos biológicos o los patrones de sueño de las personas, altera las migraciones y a los animales nocturnos, los cuales tienen su principal actividad en horas que no hay luz solar, hasta los insectos tienen su mayor actividad en las noches.