SE CAYó EL CIELO
La familia Alanís, de Lerdo, perdió en segundos gran parte de su patrimonio debido a las lluvias.
Fue el domingo pasado cuando ocurrieron dos derrumbes que pusieron en riesgo la integridad física de padre e hijo en el ejido Monterrey, de Lerdo.
Este caso es uno de los cerca de 40 registrados en Lerdo, donde la gente ha perdido sus viviendas debido a derrumbes.
Antonio Alanís Ceniceros y su padre, Esteban Alanís Venegas, se expusieron a quedar sepultados en su propia casa el fin de semana pasado.
Fue el domingo que perdieron gran parte de su hogar. Eran las 10:30 de la mañana cuando se cayó la cocina en la vivienda de adobe que tenía ya más de 40 años.
"Mi 'apá' apenas iba a entrar a la cocina y se le cayó la pared de enfrente, si ha llegado adentro ahí lo agarra", dice Antonio.
Padre e hijo se dedican a trabajar el campo, siembran flores y chile como gran parte de los lugareños.
Actualmente la familia Alanís sigue preparando alimentos donde era la cocina, ahí a la intemperie, pues no tienen más adonde ir.
Durante el derrumbe también perdieron el refrigerador.
También se derrumbó por completo el baño y además una habitación se encuentra endeble, a punto de caer.
Sólo en Monterrey hay otras tres familias afectadas de la misma manera; con severos derrumbes.
Desconocen
Los afectados por derrumbes no saben cuáles son los trámites que tienen que realizar para ser incluidos en algún programa municipal, estatal o federal y construir de nuevo.
Fotos: Diana González
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