Si bien, hoy el beisbol no es tan concurrido como en algún tiempo lo fue en la Comarca Lagunera, en temporadas pasadas y más recientes el estadio de los Vaqueros Laguna, el estadio Revolución, ha presentado muy buenas entradas en cuanto a asistencia, convirtiendo así a La Laguna, en la sexta mejor plaza en este departamento por partido dentro de la Liga Mexicana de Beisbol.
Ir al "beis" en nuestra región a un partido de los Vaqueros, ofrece diferentes atracciones, la experiencia de ir al Estadio Revolución no es la misma a la que vives en cualquier otro parque, la directiva naranja desde mi punto de vista ha dado en el clavo cada año para tener varios detalles que entretienen al público que asiste a un partido y no necesariamente es aficionado al rey de los deportes.
Desde siempre el beisbol en la Comarca ha sido acompañado por buena música, ya sea del sonido local, o en vivo, como lo era en el estadio Rosa Laguna, canción tras canción durante tiempos muertos del partido. Además, desde el año 2003, cuando se estrenó la franquicia de Vaqueros Laguna, a lo profundo de los jardines izquierdo-central se colocó una pantalla gigante que vino a traer todavía más diversión al respetable.
Los grupos de animación que tiene el equipo de sus diferentes patrocinadores, los concursos que se hacen a la mitad de una entrada, la variedad de alimentos, son otros atractivos del juego de pelota en nuestra ciudad. Lógicamente al aficionado de hueso colorado le basta ver el partido para disfrutar de la noche, pero mucho público se fija en otras cosas además del juego, desde luego.
Pero la atracción que ha tenido el beisbol local y el equipo de Laguna, desde que tengo memoria es su mascota oficial, "El pollo", y siempre ha sido el pollo para los aficionados, desde que eran Algodoneros. Yo estuve ese día de la inauguración de temporada del 2003 contra los Acereros de Monclova, cuando dieron inicio los Vaqueros Laguna, y en lugar del pollo, saltó una botarga de toro al terreno de juego, causando una sensación de extrañeza en el público, quien no tardó en corear el nombre del pollo.
Tanta fue la presión de la gente ante esta nueva botarga, que simplemente no funcionó, la afición se encariñó con el viejo pollo, y tuvo que volver a salir los siguientes días la botarga del pollo, y hasta la fecha está ahí la mascota del equipo lagunero, haciendo las delicias de chicos y grandes, de propios y extraños. Se rumora que para este 2016 la nueva directiva de Vaqueros planea una mascota nueva, poner una botarga de un vaquero, utilizando al pollo como un coestelar, ¿funcionará?
Intentar dejar en segundo plano a la mascota que tiene años con Vaqueros Laguna, la que se ha encargado de hacer sonreír al aficionado a pesar de las innumerables derrotas que ha sufrido el equipo, yo sí creo que va a ser muy complicado, pero yo les doy toda mi buena vibra.
Pues es un hecho que los hermanos Arellano vienen a cambiar hasta de pañales a Vaqueros Laguna, lo que parece indicar que este equipo se queda porque se queda para próximas temporadas en Torreón, sin arriesgar a decir cuántas. Ya se observan las butacas ubicadas en lo que es la zona general sombra, allá en el jardín izquierdo, como lo habían prometido, pues ahora veo por qué la subida de precios. Ya se espera también la llegada de una nueva pantalla gigante.
Además de que se quitarán las rejas que obstaculizaban la vista de los aficionados de las primeras filas, aunque lógicamente no se quita la malla protectora detrás del home. De que ha habido cambios los ha habido, cambios que dejan un buen sabor de boca al aficionado y que lo hacen ilusionarse para la próxima temporada 2016.
Roberto Piña Ochoa
Robertopinaochoa@gmail.com