ASEGURA TU SALUD DESDE HOY
De la manera como atiendas tu salud durante tus primeros años adultos -especialmente los 10 años que preceden a la menopausia- puede ser más importante de lo que hagas en otra etapa de tu vida.
Hay un período de 10 a 15 años en los que se advierten gradualmente cambios psicológicos, de conducta y actitudes. El mensaje es que las mujeres pre menopáusicas necesitan pensar en su salud elaborando un plan a largo plazo. Los años maduros son los de más alto riesgo para adquirir enfermedades serias, tales como males cardiacos, osteoporosis, diabetes y artritis. Pero atendiendo tu salud ahora, te va a resultar muy conveniente. Un tercio de la vida de la mujer promedio comprende los años reproductivos y es el tiempo apropiado para atender tu salud. En términos de prevención: hay cosas que van a marcar una diferencia en cómo te vas a sentir más adelante. Si tienes sobrepeso o fumas o bebes demasiado ahora, ¿cómo van estos factores a afectar tu salud en el largo plazo? En efecto, tú tienes un gran control sobre tu futura salud. Aquí están unos consejos para iniciar tu plan:
1. ENFOCA TU ATENCIÓN EN UNA DIETA NUTRITIVA. Escoge una variedad de alimentos. Los nutrientes actúan sinergéticamente (acción concentrada de varios órganos) y tú estás fomentando tu buena salud si tu alimentación se compone de: la mitad de frutas y verduras, un cuarto de cereales (granos) y un cuarto de proteínas, tales como pollo, huevos y pescado. El pescado contiene elementos nutritivos que ayudan a prevenir el cáncer y enfermedades del corazón.
2. VIGILA LA CONDICIÓN DE TUS HUESOS. Si quieres evitar la osteoporosis más tarde, actúa ahora. Una de cada dos mujeres va a sufrir una fractura osteoporosea durante alguna ocasión en su vida. Haz ejercicio de pesas y consume dosis adecuadas de calcio. Si no tomas el suficiente calcio en tus comidas, añade un suplemento. Fuentes inmediatas de calcio son la leche, el yogurt, el jugo de naranja y los quesos.
3. CONTROLA TU COLESTEROL. Si uno de tus papás ha sido diagnosticado con problemas cardiacos, debes estar pendiente de constatar el nivel del colesterol bueno y malo, así como los triglicéridos.
4. MANTÉN UN PESO SANO. Aun un sobrepeso de 5 a 10 kilos puede aumentar el riesgo de problemas cardiacos.
5. ACTIVIDAD FÍSICA. Estudios recientes demuestran que siendo una persona físicamente activa le ayuda a tu corazón y a tus huesos, también reduce el peligro de algunos cánceres, así como de la diabetes. Un balance de los tres tipos de ejercicio es importante. Estos son aerobics, ejercicios cardiovasculares como caminar, trotar, brincar la cuerda, etc., hacen que el corazón y los pulmones trabajen vigorosamente y con más eficiencia. Los ejercicios fortificantes con pesas o aparatos de resistencia, estimulan los músculos y mejoran la fuerza, la flexibilidad y el balance. Los ejercicios de estiramiento reducen la tensión de los músculos. Prueba la yoga y el Tai Chi para una completa relajación.
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