Votación. El Senado decidió apoyar por mayoría un informe que pide la destitución de la presidenta suspendida, Dilma Rousseff.
El pleno del Senado brasileño aprobó anoche por 59 votos a favor y 21 en contra un informe que pide continuar el juicio político contra la presidenta suspendida, Dilma Rousseff, quien de esa manera queda a solamente un paso de su destitución.
La aprobación del informe, que acusa a la mandataria de graves irregularidades fiscales que llega a calificar de "atentado contra la Constitución", llevará a una nueva y última sesión del pleno del Senado, que deberá celebrarse a fines de este mismo mes.
En esa sesión, que será convocada por la Corte Suprema, Rousseff será despojada de su mandato si así lo decide una mayoría calificada de 54 votos entre 81 posibles, lo que supone las dos terceras partes del pleno del Senado.
Si se llega al extremo de la destitución, el mandato que acaba el 1 de enero de 2019 será completado por Michel Temer, quien como vicepresidente sustituye a Rousseff desde el pasado 12 de mayo, cuando fue suspendida de sus funciones para responder al proceso.
A lo largo de los debates que se desarrollaron durante unas 16 horas, dirigidos por el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lewandowski, los defensores de Rousseff y los favorables a su destitución cruzaron duras palabras, pese a que fueron instados por el magistrado a despojarse de todas las "pasiones partidarias".
Uno de los más encendidos discursos lo pronunció el senador Lindbergh Farias, del Partido de los Trabajadores (PT), quien denunció el proceso como "un golpe, una farsa, y un fraude" a la Constitución, que atribuyó a la "élite económica" del país.
"Si quieren lucha de clases, estamos preparados para combatir en el Parlamento y en las calles de este país", proclamó el senador del PT.
Farias incluso apeló ante el presidente de la Corte Suprema a fin de que "suspenda" el trámite, al menos hasta que se aclare una sospecha de corrupción que la revista Veja vertió el pasado fin de semana contra Temer.
Según Veja, el empresario Marcelo Odebrecht, condenado a 19 años de prisión en primera instancia por las corruptelas en la petrolera estatal Petrobras, pactó un acuerdo de cooperación judicial con miras a una reducción de pena y acusó a Temer de haber recibido dinero "en negro".
La revista sostuvo que Odebrecht confesó que en 2014 se reunió con Temer y pactó una "donación" para campañas electorales de diez millones de reales (3.1 millones de dólares).
Ese dinero, según la versión de Veja, tenía origen en la red de corrupción que operó en Petrobras y Temer supuestamente estuvo al tanto de eso, lo que no le impidió aceptar la "donación".
Lewandowski, sin embargo, descartó la solicitud del senador del PT y argumentó, desde el punto de vista jurídico, que las sospechas contra Temer "son ajenas" a lo que el Senado discute y no pueden "confundirse" con el juicio al que responde la mandataria.
Bernie Sanders pide elecciones en Brasil
El senador estadounidense Bernie Sanders condenó ayer el proceso contra la presidenta suspendida Dilma Rousseff en Brasil, que “parece un golpe de Estado”, e instó al Gobierno de Barack Obama a pedir que haya “elecciones democráticas” en el país suramericano para resolver la crisis.
Sanders, que fue el rival de Hillary Clinton en las elecciones primarias demócratas en EU, afirmó en un comunicado que está “profundamente preocupado por los esfuerzos para alejar del poder a la presidenta elegida democráticamente”.
“Para muchos brasileños y observadores, el controvertido proceso (contra Rousseff en el Senado) se parece más bien a un golpe de Estado”, indicó el popular senador por Vermont.
“El intento de alejar del poder a la presidenta Rousseff no es un juicio legal, sino político. Estados Unidos no puede quedarse en silencio mientras las instituciones democráticas de uno de nuestros aliados más importantes son socavadas”, argumentó Sanders.
¿Qué sigue en el proceso?
Se agotan las opciones para Dilma
⇒ La última fase del proceso sería realizada a fines de este mes, cuando el pleno del Senado deberá celebrar una nueva sesión que se calcula que pudiera durar entre tres y cinco días, pues volverán a ser escuchados testigos de la acusación y la parte acusadora.
⇒ En esa última sesión, Rousseff será despojada del cargo si así lo decide una mayoría calificada de 54 votos (dos tercios), con lo cual el mandato que vence el 1 de enero de 2019 deberá ser completado por Michel Temer, quien la sustituye interinamente desde mayo pasado.
⇒ Sin embargo, si Rousseff fuera absuelta, recuperaría el poder y Temer debería volver a ocupar la vicepresidencia, aunque su abierta enemistad con la mandataria, que lo acusa de "golpista", pudiera llevar a su renuncia.