Los nuevos socios naranjas afirmaron que no tienen intención de que el equipo pueda mudarse de ciudad. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Vaqueros Laguna ha iniciado oficialmente una nueva era. El equipo naranja cuenta con nuevos socios inversionistas en las personas de los hermanos mazatlecos Érik y Juan José Arellano Hernández, quienes fueron presentados de manera formal mediante una concurrida conferencia de prensa.
Los nuevos socios naranjas afirmaron que no tienen intención de que el equipo pueda mudarse de ciudad, hablaron de numerosas mejoras en infraestructura al estadio de la Revolución y no descartaron la idea de construir una nueva casa para Vaqueros Laguna, siempre y cuando los aficionados de la Comarca respondan apoyando y exigiendo al equipo en cada juego.
En la reunión informativa estuvieron presentes Carlos Gómez del Campo, presidente ejecutivo de Vaqueros Laguna, además de los nuevos socios, Juan José Arellano Hernández y Érick Arellano Hernández, acompañados de Emilio Hernández, CEO del Grupo Álamo México, Humberto Avilés, directivo del grupo ArHe, Luis Dovalina Flores presidente ejecutivo adjunto de Vaqueros Laguna y David Cortés, gerente general de la organización naranja.
El primero en tomar la palabra fue Carlos Gómez del Campo: “presentamos como asociados del Club Vaqueros Laguna a los hermanos Juan José y Érick Arellano Hernández, quienes vienen a sumarse al equipo. La razón por la que nos hemos asociado con los hermanos Arellano es acelerar el tema de competitividad, de que el equipo pase de ser competitivo a ser protagonista, en beneficio de los aficionados de Vaqueros Laguna. Este es un equipo de la Comarca Lagunera, así lo hemos asegurado y así lo hemos retratado. Es un orgullo hacer una alianza estratégica con jóvenes talentosos, arriesgados que vienen a aportar y a sumar al proyecto del beisbol en La Laguna”, aseguró.
Enseguida, ante la pregunta de la permanencia o la mudanza del equipo hacia el puerto de Mazatlán, Sinaloa, rumor que ha circulado en días recientes, el nuevo socio Juan José Arellano, respondió: “somos de Mazatlán, nacimos ahí porque mi mamá así lo decidió. Mis papás vivían en la zona fronteriza de Tijuana, pero 42 días antes de que naciera Érick nos movimos a Mazatlán porque mi madre quería hacer costumbres sinaloenses del embarazo. Nos encantaría que Mazatlán tuviera equipo de Liga Mexicana de Beisbol, pero ahora no existe el compromiso ni el apoyo para poder llevar un equipo a la ciudad. Además, creo que sería un crimen llevarse a una organización con esta afición y este apoyo que tiene Vaqueros. Nosotros estamos con la firme intención de venir a apoyar al club, premiar nuestra alianza de negocios con grupo Soriana, mientras nosotros estemos al frente, creemos que es muy difícil que el equipo pueda irse porque para eso la afición debería abandonarnos, lo cual es muy difícil”, aseguró.
El mayor de los hermanos Arellano añadió: “Marineros de Mazatlán ahora simplemente existe en una acta constitutiva, una previa autorización de la Liga Mexicana de Beisbol para abrir una plaza en un futuro, pero ahora mismo no existen las condiciones para tener beisbol de verano en Mazatlán. No hay apoyo del gobierno, de patrocinadores, no hay ni estadio propio, así que no es viable en estos momentos. En caso de que se dieran esas condiciones, Vaqueros Laguna no se convertirá en Marineros de Mazatlán”, sentenció.
Mejorar los resultados deportivos logrados en los años recientes es la principal ambición de los nuevos asociados naranjas, lo que esperan lograr utilizando la experiencia que han tenido manejando a los Leones de Yucatán, franquicia que compraron hace 3 años: “vamos a aportarle más competitividad al equipo, que tenga mayor actitud. Ya se dieron algunos resultados en Yucatán, tenemos el primer lugar en asistencia de toda la liga. Eso es parte del trabajo que vamos a realizar”, adelantaron.
En cuanto a las mejoras planeadas para el estadio de la Revolución, revelaron que: “hay planes y pláticas para cambiar la pantalla a algo más sofisticado. Por los tiempos va a ser muy complicado que en el día inaugural vean grandes cambios, vamos a ponerle butacas a todas las zonas del estadio, estamos por cerrar con un restaurante que tenga música de banda para que pueda establecerse en el estadio”, describieron.
Los socios presentes negaron hablar de porcentajes de propiedad, asegurando que va contra los estatutos de la Liga Mexicana de Beisbol: “no podemos hablar de porcentajes en cuanto a los dueños del equipo, es necesario pasar por la asamblea de la Liga Mexicana de Beisbol para poder definir esos detalles, así que será en septiembre, al pasar por esa asamblea, cuando podremos definir los porcentajes. Por lo pronto debemos someternos a los estatutos y el artículo 28 del reglamento de la asamblea de la Liga Mexicana de Beisbol”.
Finalmente, Juan José Arellano confesó que fue con base en su grupo de negocios, que hicieron alianzas con grupo Soriana, dueños de Vaqueros Laguna, como se convencieron de invertir en el equipo naranja: “le apostamos al beisbol. Contamos con una empresa como Alamo, otras más que trabajan en el ramo inmobiliario, en la renta de automóviles y el pasar por Torreón es un corredor natural para nuestros negocios, vamos a expandirnos hasta Ciudad Juárez y esto es parte de nuestro proceso de expansión”, explicó.
