Aunque buena, la idea de convertir en composta los restos de los perros callejeros que son sacrificados en el Centro de Control Canino de Torreón no es viable, pues violenta la Norma Oficial NOM-087-ECOL-SSA1-2002. El proyecto se dio a conocer en septiembre del 2015, con el que pretendían combatir la problemática de los perros callejeros pues se estima que son entre 90 mil y 100 mil.
Lo presentó la Universidad Antonio Narro ante el Consejo de Salud.
La NOM considera los restos de animales de perreras como "residuos peligrosos".