Fueron 100 reos los que se reubicaron a varios reclusorios del estado, dependiendo de su domicilio, aunque extraoficialmente se pudo conocer que la mayoría fueron internados en el Centro Penitenciario de Torreón. (EL SIGLO DE TORREÓN)
El desalojo de los internos del Centro de Readaptación Social (Cereso) en San Pedro, que tuvo lugar la madrugada del martes, fue para eficientizar los espacios y garantizar sus derechos humanos, declaro el director del Centro Penitenciario de Torreón Jesús Francisco Estrada Picena.
El funcionario agregó que fueron 100 reos los que se reubicaron a varios reclusorios del estado, dependiendo de su domicilio, aunque extraoficialmente se pudo conocer que la mayoría fueron internados en el Centro Penitenciario de Torreón.
Sobre el uso o destino que se le dará a las instalaciones, Estrada Picena dijo que todavía no se sabe. Aunque según comentarios de los familiares de los reclusos, al parecer será reubicada la Residencia Juvenil, que también se encuentra en San Pedro, mientras que otros mencionaron que se instalaría un cuartel de lo que antes era el Grupo de Armas Tácticas Especiales (GATE).
Cabe mencionar que se observa que en un espacio frontal del inmueble se están realizando algunas obras.
Por su parte, familiares de los internos se encuentran con incertidumbre y temor, puesto que muchos no saben todavía a dónde los mandaron y temen por la seguridad de los reclusos al considerar el Centro Penitenciario de Torreón como un "foco" de inseguridad.
Ayer algunas personas arribaron al Cereso de San Pedro, para recoger las pertenencias de sus familiares, pues algunos lograron contactarse con ellos para pedirles que recogieran sus cosas y se las llevarán al Cereso de Torreón, a donde los reubicaron.