Rubén Sosa pone su chispa a Vaqueros

Una chispa de talento, habilidad, pimienta y mucha velocidad llegó esta temporada a Vaqueros Laguna y lleva el nombre de Rubén Darío Sosa, el pelotero dominicano que arribó al equipo naranja durante el pasado mes de mayo y de inmediato se convirtió en una de las cartas fuertes de la novena lagunera, contagiando además a los aficionados con su manera de divertirse adentro del diamante.

Nacido el 23 de septiembre de 1990 en Santo Domingo, República Dominicana, este habilidoso outfielder viste su tercer uniforme en la Liga Mexicana, aunque podría considerarse su primera oportunidad real, ya que el año pasado apenas disputó 2 juegos con los Diablos Rojos del México y 8 más con los Rojos del Águila de Veracruz. Llegó sin hacer mucho ruido a Laguna y ha sido de gran ayuda para los naranjas, aportando con su bateo, su defensiva y su espectacular corrido de bases, donde destaca entre los 10 mejores robadores de la liga, a pesar de que llegó a mitad de temporada.

Se trata de un primer bat natural, con la capacidad de pararse por cualquiera de los dos lados del plato, sabe tocar la bola, tiene un guante confiable y hace buenos contactos con la esférica, todo lo que un mánager le pide al encargado de abrir el Line Up. Fue firmado por la organización de los Astros de Houston en el draft amateur del año 2011, comenzando su andar en Ligas Menores y rápidamente en el 2013 ya había sido ascendido hasta clase Triple A, la antesala de las Ligas Mayores, donde lamentablemente no ha recibido una oportunidad a pesar de sus excelentes condiciones.

Con Vaqueros está bateando para un impresionante promedio de .391 en 48 juegos, demostrando que está en plenitud y trabajando duro para ayudar al equipo: "primeramente, la gloria es de Dios, yo siempre estoy trabajando fuerte, también le doy muchas gracias a la directiva que me han dado la confianza y el apoyo de venir aquí a jugar sin presión. También le dedico mucho de lo que se ve, los numeritos, debo darle las gracias al coach Ramón (Orantes), él siempre está trabajando conmigo desde que yo llegué, me hizo sentirme cómodo, parte de la familia y también todo el equipo que tenemos, hay buena armonía y eso lo hace más fácil para mí", contó en exclusiva.

Sosa tiene bien definida su función en Laguna y la acepta con gusto: "estoy teniendo buenos turnos, estoy dando buenos contactos, eso es lo primordial. Además me estoy embasando y anotando carreras que eso es lo importante para ayudar al equipo a ganar. Yo se cuál es mi juego, yo no soy un jugador de dar jonrón, aunque a veces le doy bien lejos a la bola, pero eso es ya ocasional, yo nunca estoy buscando dar jonrones, yo busco darle duro a la bola de línea y llegar a base para ayudarle al equipo", declaró.

Buscar el campeonato de bases robadas no obsesiona en lo más mínimo al capitaleño: "en realidad no sé cuántas bases robadas tengo, para serte honesto y no sé cuántas tiene el líder, yo no soy un jugador de esos ambiciosos, si fuera por mí, podría robarme la base cuando quiera, pero yo busco el tiempo indicado para poder robarme la base y así también poder ayudar a mi equipo y darle pitcheos también a quien está bateando atrás de mí, creo que eso es lo más importante conmigo, que no sólo es robarme bases por robar", dijo tajante.

Su llegada al vestidor naranja fue con timidez, pero rápidamente le hicieron sentir la hospitalidad lagunera: "los muchachos me recibieron muy bien, al principio yo estaba un poco tímido pero ellos me hicieron sentir bienvenido e hicieron que se me fuera la vergüenza. De verdad que tenemos una gran armonía, es la primera vez que yo estoy en un equipo que cuenta con tanta armonía, todo el mundo se lleva bien, relajamos y somos una familia, creo que esa va a ser la clave para nosotros llegar a los Play Offs y ganar", adelantó.

Aunque ha jugado en parques dominicanos, donde el fervor por el rey de los deportes es casi una religión, Sosa se dijo sorprendido por la afición lagunera, sobre todo por quienes fueron a seguir a su equipo hace dos fines de semana a la capital de Coahuila: "el apoyo de verdad que es tremendo, siempre los fanáticos vienen a los juegos a la casa, pero me sorprendí cuando jugamos la serie en Saltillo y ellos fueron hasta allá y nos apoyaron, de verdad que eso me hace sentir muy bien con ellos, les agradezco mucho el apoyo y los invito a que sigan viniendo porque nosotros vamos a dar el ciento diez por ciento para ganar", advirtió emocionado.

Sosa ya ha dado dos cuadrangulares esta temporada que han sido fundamentales para ganar juegos, pero aunque le gusta aportar, tiene claro que esa labor le corresponde a sus compañeros: "yo no quiero ponerme ningún rol o jugar un papel estelar, yo solamente quiero hacer mi trabajo, yo sé qué es lo que debo hacer: embasarme, poner la bola en juego, robarme bases y anotar carreras, creo que eso es lo que va a ayudar al equipo a ganar. Yo dejo a gente como René, tenemos a Ricky que son los jugadores de poder, a Snyder, que ellos se encarguen de dar los jonrones, ellos van a ser los héroes, yo voy a hacer como quien dice, el trabajo sucio", confesó.

Para los aficionados, Rubén aún tiene muchas sorpresas guardadas: "les pedimos que nos sigan apoyando, que vengan al estadio porque nosotros vamos a dar siempre el máximo, tenemos buen equipo y vamos a llegar muy lejos. Vamos a sorprender a mucha gente, ya por lo que veo hay muchos que están sorprendidos, pero nosotros todavía queremos más. Vamos a ir día a día, tomarlo juego a juego, a tratar a todos los equipos igual, como si cada uno fuera el que está en primer lugar", finalizó.