Saca lo mejor de ti
La gripe es uno de los padecimientos más comunes que te puede atacar en invierno, y también es uno de los más incomodos, ya que entre la enfermedad y los medicamentos, no puedes evitar sentirte y hasta lucir como un “muerto viviente”.
Y es probable que lo único en lo que pienses una vez enferma, es en permanecer debajo de las cobijas y dormir todo el día, sin embargo, para la mayoría que se tiene que levantar día con día, esto puede resultar un poco complicado, o incluso imposible.
Así que antes de descuidar tu imagen, recuerda que “como te ves, te sientes” y que tu pronta recuperación también depende en gran medida de tu estado psicológico.
Por lo tanto, no dudes en seguir los siguientes consejos que te ayudarán a disimular los efectos de la gripe y a proteger las áreas delicadas de tu cuerpo.
Tu piel, la primer víctima
La resequedad es uno de los principales efectos del constante goteo de nuestra nariz, y de los componentes de los medicamentos que se utilizan para combatir la gripe. Por ello resulta de vital importancia mantenerla hidratada, bebiendo líquidos y con la aplicación de cremas hidratantes.
Para elegir la mejor crema para tu piel, tendrás que verificar que no contenga retinol o ácidos, debido a que estos podrían irritarte y dañarte aún más.
Para las áreas que notes con mayor resequedad, como tu nariz, puedes crear una mezcla de aceites naturales, a partir de vitamina E, manzanilla y aceite de almendras.
También es recomendable utilizar pañuelos desechables suaves con aloe vera, aplicar un hidratante directamente en el área afectada y usar una base de maquillaje liquida para que no se noten las grietas en la nariz.
Tu mirada lo dice todo
Los ojos son capaces de revelar nuestro estado de salud de forma inmediata, por lo tanto, hay que evitar ciertos colores para que estos se vean menos irritados. Los púrpuras, rosados, brillantes y nacarados, son los tonos que se recomienda evitar.
Si se encuentran muy afectados por la congestión, lo mejor será que intentes liberar las fosas, para disminuir la presión. De igual forma puedes limpiarlos con gotas de manzanilla para prevenir su enrojecimiento o la acumulación de lagañas.
Otro consejo es evitar delinear los ojos con color negro, debido a que corre peligro de correrse en caso de lagrimeo; por el contrario puedes delinear la raya interior del párpado de color carne, que le agregará luz a tus ojos.
Protege tus labios
Los días en los que te encuentras más delicada, podrás notar que tus labios están “partidos” debido a la deshidratación que sufre tu piel, y a que esta parte de tu cuerpo carece de un pigmento que le da color a la piel, llamado melanina; por lo cual es más sensible que otras áreas de tu cuerpo.
Para protegerlos puedes usar bálsamos a base de vaselina blanca, y en cuanto al color, es recomendable que elijas brillos o labiales en tonos naturales.
Luce radiante
Otro de los mayores problemas que se pueden presentar, son los enrojecimientos o la falta de color de la piel. Para ello, una base de maquillaje en el tono adecuado es indispensable, pero si lo que quieres es recuperar tu “brillo”, nada mejor que utilizar iluminadores o inclusive bronceadores que le devuelvan la vida a tu tez.
Aplícalo en tus mejillas y difumínalo bien, para que obtengas un aspecto natural y saludable.
Finalmente no te olvides de las ojeras, un poco de corrector con iluminador serán suficientes para desvanecer ese cansancio.
¡Respira!
Para verte y sentirte mejor, una de las cosas que querrás hacer, es liberar tus vías respiratorias y con ello aliviar parte de los síntomas de tu gripe. Esto puedes lograrlo con el uso de aromaterapia en casa, y especialmente con el aceite de eucalipto.
Añade cuatro gotas de este aceite esencial en seis tazas de agua para hervir; sumerge una pequeña toalla en la mezcla con el aceite, sácala, exprímela y colócala en tu cara por algunos minutos para respirar la esencia y el vapor.
Fuente:
www.imujer.com, vidayestilo.terra.com.mx, es-us.finanzas.yahoo.com