Opiniones divididas ha levantado entre la afición lagunera el anuncio de la segunda etapa del Territorio Santos Modelo. Hay quienes aplauden la inversión que Alejandro Irarragorri en conjunto con otros empresarios pondrán en marcha, pero también están los que consideran un gasto lujoso e innecesario la construcción de un mall en la otrora Casa del dolor Ajeno y piden al presidente del club que se concentre en comprar buenos refuerzos.
Si bien es cierto que dentro del TSM además del Estadio Corona se cuenta con una iglesia, una cafetería, gimnasio y hasta una televisora, pero el flujo de personas que visitan las instalaciones del complejo es muy bajo. El ahora llamado Templo del Desierto abre sus puertas cada 15 días para recibir alrededor de 20 mil espectadores. La construcción de un centro comercial dará vida diaria a un inmueble que permanece cerrado 14 días seguidos y más de un mes cada fin de temporada. Se espera que el número de visitantes diarios al TSM aumente con el mall y detone la economía no sólo del club sino de la zona norte de la ciudad.
El proyecto de un Estadio con centro de entretenimiento es nuevo en América Latina pero alrededor del mundo hay ejemplos probados de recintos deportivos que se complementan con distritos de ocio. En Londres está la Arena O2 y en Estados Unidos se ubica el Gillete Stadium, casa de los Patriotas que cuenta con este planteamiento polifuncional.
Esperemos que el desarrollo de la Segunda Etapa del TSM se lleve a cabo sin contratiempos y que realmente sirva como un detonante económico no sólo para Torreón sino para la Comarca Lagunera entera, que vaya que necesita inversiones de este tipo para volver a posicionarse como una de las zonas metropolitanas principales de México.
En el plano deportivo, la próxima semana es el draft así que hay que mantenernos atentos a las noticias que Santos Laguna genere. La apuesta albiverde para la próxima temporada será por un delantero probado. A ver qué.
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