'Zotoluco'. Mejor no se podía despedir Eulalio López 'El Zotoluco' de Durango, que con tres orejas y un rabo.
Las golodrinas retumbaron en el cielo gris de Durango. Esta vez no hubo ese brillo en el "techo duranguense", estaba gris, con un dejo de nostalgia, con ese sabor que dejan las despedidas.
Pero solo él, un grande, un conocedor del terreno podría irse así, a hombros, por la puerta grande, con todos los trofeos en la mano, con una sonrisa en los labios, triste y feliz, tan norte sur como su carrera, como su vida de torero.
Eulalio López, "El Zotoluco", se despidió de Durango como el gran triunfador, con tres orejas y un rabo