La consumía. Con Sex and The City no tenía tiempo.
La actriz Kim Cattrall reveló que su participación en Sex and the City, con la que alcanzó la fama gracias a su personaje de "Samantha Jones", le costó el divorcio de su tercer esposo, Mark Levinson.
"Me costó mi matrimonio porque nunca estaba en casa. Nunca estaba ahí y mi esposo estaba solo y molesto y competitivo y eso fue realmente difícil, fue realmente duro", dijo a news.com.au.
Cattrall comentó que llegó el momento en el que empezó a pasar más tiempo con su familia de Sex and the City que con su familia real.
La actriz se casó con Levinson en 1998 y poco después ella obtuvo el papel que la llevaría a la fama: el de la publirrelacionista "Samantha Jones", una mujer liberal y muy abierta en cuestiones sexuales.