Ante el pronóstico de bajas temperaturas, los padres de familia deberán estar atentos de una posible suspensión de clases, pues en base a lo que marque el termómetro se determinará si se llevarán a cabo las clases.
Demetrio Zúñiga Sánchez, subsecretario de Educación en la Región Laguna, dijo que no se puede adelantar una posible suspensión debido a que la normativa marca que la determinación se toma según la temperatura registrada una hora antes de la entrada.
“Si a las 6 del a mañana tenemos una temperatura de -3 grados no habría actividad en secundaria; si a las 7 de la mañana el termómetro marcara -1 o menos, no habría actividad primaria y si a las 8 de la mañana el termómetro señalara 0 grados o menos, no habría actividad en preescolar, esto es lo que nos dice la normativa”.
Demetrio Zúñiga mencionó que si la baja temperatura prevalece, hay suspensión de labores también para docentes, de lo contrario, tanto alumnos como maestros deberán asistir.
Agregó que de tener estas temperaturas extremas a la hora ya indicada, una vez que se dé la instrucción por parte de la Secretaría de Educación de Coahuila, comenzarían con la difusión a través de los diferentes medios de comunicación para que estén enterados.
Sin embargo, el subsecretario señaló que “el mejor termómetro es el papá”, pues finalmente será quien determine si las condiciones climatológicas no afectaran la salud de sus hijos.
“En este asunto del invierno yo les recomiendo a los padres que sean ellos el mejor de los termómetros, si los niños presentan alguna sintomatología de enfermedad respiratoria lo más recomendable es que den aviso a la escuela y que vean la manera que sus niños sean atendidos por los profesionales de la salud y no automedicarlos”.
No se puede adelantar una posible suspensión de clases debido a que la determinación se toma según la temperatura marcada una hora antes de la entrada. (ARCHIVO)
