Vecinos de las colonias San José y 5 Mayo temen por la colocación de una antena de telefonía cuya instalación inició sin permisos expedidos por el Ayuntamiento.
Ayer los vecinos acudieron al término de la sesión de Cabildo y al no haber ninguna autoridad municipal que les diera informes sobre este asunto captaron la atención de la fracción de regidores del PAN.
El problema, expone el señor Roberto Adame Armijo, es que la construcción de la antena de telefonía inició sin ningún permiso y ahora los vecinos se oponen por miedo a la radiación que genere y porque esto lo relacionan con efectos adversos en el organismo como el cáncer.
La señora Librada García dijo que anteriormente acudieron a la Dirección de Obras Públicas y luego de esta entrevista la obra se detuvo porque no tienen permiso del municipio ni se ha autorizado uso de suelo por parte del cabildo.
“La hicieron un fin de semana antes de la Semana Santa”, expuso Librada.
Y es que de inicio cualquier empresa que tenga la intención de colocar este tipo de estructuras debe solicitar al Ayuntamiento los permisos y éste a su vez analizar la colocación considerando aspectos sociales, económicos, de impacto ambiental y de salud.
Incluso se debe ubicar , por ejemplo, si las estaciones de base están cerca de jardines de niños, escuelas y parques infantiles o de lugares donde hay personas de la tercera edad al ser considerados como grupos mas vulnerables a la radiación.
Los vecinos desconocen actualmente los niveles de radiación de la antena cuya colocación inició de repente.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) cuenta con estudios científicos que han definido las potencias máximas de radiofrecuencia permitidas que no generan impactos en la salud humana.
En otros países se colocan antenas pequeñas en lugar de grandes para reducir aún más la radiofrecuencia colocándolas en lámparas del alumbrado público, puentes, árboles, fachadas de edificios con radiobases mimetizadas que además no chocan con el entorno ni “afean” las colonias.
