COMPRANDO LOS MEJORES COCOS
Cuando compramos cocos frescos, en muchas ocasiones nos encontramos con que la mayoría de ellos son menos que satisfactorios. El secreto está en cómo seleccionarlos. Elija el coco más pesado que pueda encontrar. Para asegurarse de que está lleno de líquido, agítelo vigorosamente. Debe sonar "flojo" (uno que carezca del líquido suficiente, estará seco y sin sabor). Examine la cáscara muy bien para encontrar cuarteaduras. Si los "ojos" están húmedos y suaves, la carne del coco en su interior estará suave y probablemente podrida. Para usarlo, haga un agujero en los ojos del coco con un objeto filoso, como un picahielo y escurra el líquido. Coloque el coco en un horno precalentado a 350° F, durante 15 o 20 minutos, dependiendo de su tamaño. Saque del horno, envuélvalo en una vieja toalla para evitar que se balancee y colóquelo sobre una superficie dura. Después, sosteniendo firmemente la toalla, golpee el coco en diferentes lugares con un martillo. Deberá abrirse fácilmente. Quite la piel café. Disfrute el coco tal como está o úselo para su favorita receta con coco.
