Doble trabajo. Las maestras imparten las clases y se encargan de la limpieza del lugar. (ROBERTO ITURRIAGA)
Montones de tierra, bancas abandonadas y un pizarrón improvisado hacen de la Biblioteca del ejido Gabino Vázquez una escuela preparatoria.
Cuatro profesores y quince estudiantes ocupan de forma indefinida el centro cultural del poblado, en un intento por sobrevivir en su ejercicio educativo y lejos de las cabeceras municipales en La Laguna.
"La verdad es que nosotros estamos en la mejor disponibilidad de trabajar, pero tenemos un espacio muy limitado, para el próximo ciclo escolar vamos a tener más de 30 alumnos y no vamos a tener lugar suficiente", asegura, María Antonia Ibarra, una de las profesoras de la " biblioteca-escuela".
La docente y sus colegas forman parte del sistema de Educación Media Superior a Distancia del Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Coahuila (Cecytec), hasta el año pasado enseñaban a varios alumnos en un kínder de la zona Centro de Viesca.
En esa zona ya existía una preparatoria y la cantidad de estudiantes era mínima, por lo que el sistema educativo decidió asignar a los profesores a una zona "aún no cubierta", el ejido Gabino Vázquez.
El poblado se ubica entre otros lugares como Emiliano Zapata, Poanas y Congregación Hidalgo, que por su ubicación obligaba a los jóvenes a buscar escuela en las cabeceras de Matamoros y Viesca.
IMPROVISAN PARA ENSEÑAR
Sin una escuela en ese ejido, el sistema educativo pidió al Ayuntamiento de Viesca que se prestaran las instalaciones de la biblioteca en la zona, instalaciones que se encontraban cerradas y en abandono desde hace dos años.
"Agradecemos mucho por el apoyo, pero cuando abrimos la puerta por primera vez nos encontramos con todo el lugar lleno de tierra, con lagartijas y desordenado... hasta ahorita estamos limpiando y no acabamos", asegura Ibarra.
El trato de los docentes y la reapertura de la biblioteca atrajeron pronto la atención de los jóvenes en la zona, iniciaron el ciclo en enero con 15 alumnos y para el siguiente semestre las inscripciones se duplicaron, las sillas y mesas improvisadas serán insuficientes.
"Es todo un reto, las clases de informática se dan en dos laptops que trae el mismo profe, las computadoras que tenemos aquí no se han encendido, ni siquiera sabemos si funcionan", lamenta la maestra.
Este viernes los estudiantes salen de vacaciones, algunos se ocuparán en labores agrícolas o en empleos temporales antes de regresar, los profesores tienen el reto de mantenerlos en la escuela e incrementar la matrícula para "merecer" la construcción de una escuela nueva, ésa fue la promesa del mando educativo.
