TODO parece indicar que los Diablos Rojos lograron una muy buena contratación al obtener al dominicano Sandy Madera que desde el 2010 ha estado acelerado dando batazos en la Liga Mexicana y que hace dos años con Pericos de Puebla fue el campeón bateador con un porcentaje de .403 y dando 26 jonrones. No hay duda que ha sido un bateador importante desde que llegó la primera vez a Saraperos de Saltillo y debe hacer una buena pareja con Cyle Hankerd que ya ratificó que reportará con los Rojos el 10 de marzo en Mazatlán tras haber sido parte muy importante en el campeonato invernal ganado por los Venados y la Serie del Caribe ganada con categoría de invicto.
Sandy Madera comenzó su carrera como cátcher y primera base en la organización de los Atléticos de Oakland pero algo le faltó para llegar a Ligas Mayores por lo que se pasó un buen tiempo en equipos sucursales hasta que terminó su época de prospecto y tuvo que refugiarse en una liga independiente hasta que la Liga Mexicana lo encontró y aquí comenzó una nueva carrera llena de éxitos y batazos en forma consistente con varios de ellos yéndose del otro lado de la barda.
Usted sabe que Diablos estaba buscado un reemplazo en el orden al bat para Japhet Amador y de repente descubrieron que Sandy estaba disponible y ya anunciaron su contratación. Madera llegó al Beisbol mexicano por el tiempo en que hizo su aparición el cubano Bárbaro Cañizares que igualmente tuvo muy buenas temporadas en la pelota mexicana, tanto de verano como de invierno, antes de dejar a los Guerreros de Oaxaca para irse a batear al Japón.
Sandy estuvo incluso jugando con los Leones de Yucatán en un parque tan difícil para los bateadores como el Kukulkán y logró terminar sobre los .300, en un año con .386. Su máximo en jonrones en las Ligas Mayores de México es de 26 pero los Pericos lo dejaron ir posiblemente por sus 35 años de edad. Pero Sandy está fuerte como un roble y por ahora es uno de esos jugadores importados que batea siempre bien pero cambia seguido de franela. También estuvo un tiempo con los Sultanes de Monterrey.
Ahora al jugar con los Diablos tendrá oportunidad de lograr su mejor campaña en lo que respecta a jonrones ya que la altura capitalina siempre ha sido favorable para los que tienen poder.
Hace un año con los Pericos fue perseguido por lesiones pero le alcanzó el tiempo para batear .328 con 10 jonrones y 45 carreras empujadas. Lo tuvieron de Bateador Designado y es posiblemente el lugar donde lo coloquen los Diablos con Hankerd encargándose de la primera base.
Dicen que más vale pájaro en mano que ciento volando y con Sandy los Diablos tienen un bateador de respeto para que trate de que no se extrañen los 41 jonrones de Japhet. Con unos 26 serían suficientes para que la otra mitad la den los jugadores jóvenes que con un año más de experiencia deben tener más poder en sus respectivos swings. En ocasiones lo que andas buscando con catalejos lo tienes a la vuelta de la esquina.
