En el año 2011 los Piratas de Pittsburgh firmaron al joven pitcher mexicano Luis Heredia, hijo del que fuera muy buen lanzador conocido como el "Caballo" Heredia, pagando tres millones de dólares al Águila de Veracruz en una cifra que continúa siendo récord para un jugador mexicano. Ese mismo año los Azulejos de Toronto pagaron más de un millón de dólares por el jovencito Roberto Osuna, quien ya lleva dos años de cerrador del equipo canadiense y sólo tiene 21 años. Con sus 36 juegos salvados este año impuso récord de rescates para un joven de su edad y fue elegido ganador del Premio Nacional del Deporte Mexicano que será entregado el día 20 de este mes por el presidente de la República. Por su parte, los Dodgers de Los Angeles pagaron un millón con 900,00 dólares por el contrato del chamaco Julio Urías que al igual que Osuna fueron firmados originalmente para el profesionalismo por los Diablos Rojos del México. Urías ya lanzó en Ligas Mayores con récord de 5-2 y lo hubiera hecho aún mejor si el manager Dave Roberts lo hubiera utilizado de mejor manera.
Luis Heredia es el único que se ha atrasado en su carrera, pero el derecho tiene solamente 22 años de edad y este verano lanzó con el equipo Bradenton de la Liga de la Florida, clase A alta, ya en la nueva modalidad de cerrador. Lo hizo bastante bien con 12 salvamentos y récord de 4-5 con 3.64, ponchando a 41 en 54 innings de trabajo. Este invierno está lanzando en la Liga del Pacífico y hasta ahora no lo ha hecho muy bien.
Los Piratas lo tuvieron como abridor hasta que decidieron este año que por su buena velocidad podría hacer carrera como cerrador al igual que Roberto Osuna. En el 2013 llegó a tener una buena temporada de inicialista con 7-3 en el equipo de West Virginia en la Liga Sally que es también de clase A y el muchacho nacido en Mazatlán ha tenido que lidiar con lesiones que ha podido superar. Esperemos que alcance un día a Osuna y Urías en la gran carpa.
Respecto a Urías uno se pregunta qué podemos esperar de él para la temporada que viene y el famoso buscador Mike Brito, que lo recomendó al Dodgers después de verlo en las academias mexicanas del Diablos, piensa que con un año de experiencia más tendrá mejor comando en sus pitcheos y habrá mejorado en sus lanzamientos secundarios. Va a tener en 2017 los 21 años que actualmente tiene Roberto Osuna y se espera que ya en la rotación de abridores y con cuatro días de descanso entre salida y salida, el brazo le va a responder mejor.
Por lo pronto ya impuso récord como el jugador más joven de la historia en aparecer en la postemporada y tuvo récord de un juego ganado y uno perdido. Ganó en el partido que relevó contra los Nacionales y perdió el que abrió contra unos Cachorros que terminaron ganando el premio mayor que hay en el beisbol. Nos demostró que es un pitcher de mucha valentía, ya que nunca se vio desconcentrado ni nervioso en ninguna de sus salidas tan importantes al final del año para los Dodgers.