Ralph Branca, el pitcher al que le conectaron jonrones inolvidables Bobby Thomson y el mexicano Armando Flores, falleció a los 90 años de edad según informó en las redes sociales su yerno Bobby Valentine. El cuadrangular de Bobby Thomson es considerado como el número uno en la historia de Ligas Mayores ya que fue en el cierre de noveno inning del juego decisivo de 1951 para que Gigantes le ganara al Dodgers viniendo de atrás con un rally fantástico de última hora. Y Branca, que había sido un pitcher estrella los años anteriores, nunca se pudo recuperar de ese momento tan amargo y en 1952 se lastimó el brazo sin poder repetir los años triunfales que tuvo.
Armando Flores, quien llegó a jugar con los Diablos Rojos, fue un catcher mexicano que en el invierno de 1953, dos años después del cañonazo de Bobby Thomson, le conectó un jonrón al mismo Branca en el Parque Delta para que Aztecas de Alejo Peralta venciera a los Estrellas de Jackie Robinson que hicieron una gira de tres partidos por el DF y donde venía Maury Wills, luego estrella con los Dodgers donde fue el primero que acumuló 100 robos en un año de Ligas Mayores. Entonces Wills era pitcher y perdió un gran duelo con el cubano Guarao Guerra que luego jugó con los Diablos también. Ese jonrón de Armando Flores, conectado con el Parque Delta lleno hasta el tope y con miles quedándose afuera sin poder conseguir boleto, no sólo ganó el juego para el Aztecas donde jugaba Beto Ávila sino que los aficionados lo pasearon en hombros al terminar el partido. Igual sucedió cuando Pancho García bateó un jonrón con la casa llena en el cierre del décimo para que Tigres ganara al Medias Blancas que nos visitó en 1963, salida en hombros como los grandes toreros.
Branca fue una estrella que tuvo récord de 21-12 en 1947 y luego en 1949 con marca de 13-5 ganó el título de pitcheo de la Liga Nacional en ganados y perdidos con promedio de .722. Igualmente le ganó un juego al Yanquis en la Serie Mundial de 1947. En 12 años de Grandes Ligas logró un récord ganador de 88-68 y 3.79.
Después de sus años con los Dodgers de Brooklyn pitcheó con los Tigres de Detroit y con los Yanquis, donde tuvo un récord de 1-0 en cinco partidos con 2.84 en 1954. En 1956 volvió para un solo juego con los Dodgers donde lanzó un juego y una entrada en que aunque se le llenó la casa puso cero. Fue un final estilo Hollywood al terminar su carrera con el equipo en donde se hizo famoso.
Los años pasan y las cosas se olvidan pero los cronistas que vivimos aquellos jonrones para la historia somos los encargados de contarle a los nuevos aficionados lo importante que fueron los batazos de Bobby Thomson y de Armando Flores.
Armando fue un buen catcher defensivo que en 1954 dio el primer jonrón en la historia del Parque del Seguro Social que entonces no estaba terminando ya que se trabajaba en el segundo piso de preferente y que estaría completo en 1955. En aquel invierno Armando Flores seguía con el Aztecas.