Engañosa. Un 24 por ciento de los defraudadores usó tecnología para crear información falsa.
A decir de la consultora KPMG International, la tecnología es un arma de doble filo, ya que los defraudadores utilizan estas herramientas para perpetrar una variedad de fraudes en las compañías.
La tercera edición de su encuesta "Perfiles globales del defraudador 2016", revela que en 24 por ciento de los casos, el defraudador usó la tecnología para la creación de información falsa o engañosa en registros contables.
Además, en 20 por ciento de los casos, proporcionó información falsa o engañosa a través de correo electrónico u otra plataforma de mensajería, y en 13 por ciento de los casos, abusó del acceso que tenía permitido a los sistemas informáticos de la empresa.
"La tecnología en temas de fraude se vuelve un arma de doble filo y las organizaciones deben estar mejor preparadas para anticiparse a este desafío", comentó la socia líder de Forensic de KPMG en México, Shelley Hayes.
Conforme la tecnología se vuelve más sofisticada, también lo hacen los esquemas para usarla de forma malintencionada, agregó con base en la encuesta de KPMG en la que analizó 750 defraudadores que participaron en actos cometidos en 78 países, incluyendo a México. Señaló que aunque está claro que los estafadores están muy cómodos haciendo uso de la tecnología para cometer fraude, no se ven indicios de que las compañías estén tomando acciones suficientes para prevenir y detectar los fraudes.
"Los sistemas de monitoreo de amenazas y procesamiento analítico de datos son imprescindibles para las organizaciones que buscan comportamientos anómalos o sospechosos", subrayó.
