Menudo desbarajuste el que se ha armado con el tema de la remodelación de la Alameda Zaragoza, otrora uno de los principales pulmones y paseos de Torreón. Resulta que el ayuntamiento de la Perla de La Laguna ya tenía todo planeado para iniciar con las obras: proyecto y hasta empresa encargada. Pero en una de esas se dieron cuenta algunos organismos empresariales y colegiados de que todo se había hecho por debajo del agua y comenzaron a hacerla de tos porque no fueron tomados en cuenta, aunque las malas lenguas aseguran que porque no les salpicó nada, cosa que, dicen, es la única forma de que no protesten. Comentan que cuando el reclamo estalló, el alcalde Miguel Riquelme asignó al excrítico Eduardo Holguín, jefazo del Implan, para que calmara los ánimos y se sacara de la manga unos foros para escuchar a los empresarios y profesionales.
No obstante, se dice que ya todo está listo para que la encargada de las obras sea una empresa que es propiedad de una persona cercana a un empleado de la Dirección de Obras Públicas que encabeza Gerardo Berlanga, y que se ostenta como integrante del Colegio de Arquitectos, aunque los miembros de éste dicen que nunca la han visto en las sesiones. Pero los reclamos han trascendido a otros organismos y asociaciones que no fueron invitadas a participar en los foros y que consideran que los mismos no son un ejercicio adecuado de participación ciudadana por el simple hecho de que se hacen después de tomadas las decisiones y no se incluye a todos los grupos que deben estar. Rara forma de “gestionar” las obras.
***
Y ya que hablamos de participación ciudadana, nos llegan reportes de que muy en consonancia con el reglamento que se está armando en Torreón y sin el consenso -vaya contradicción- de la sociedad civil organizada, el Instituto Nacional Electoral que encabeza Lorenzo Córdova está organizando talleres regionales de cultura cívica... pero sin representantes ciudadanos. El más reciente se llevó a cabo esta semana en Monterrey, Nuevo León, y nuestros subagentes disfrazados de plumas nos reportan que a la hora de cuestionar cuántos de los asistentes acudían en representación de organismos civiles, sólo tres levantaron la mano. ¿Y los otros, quiénes eran? Ah, pues funcionarios y consejeros del propio INE, y uno que otro servidor público despistado. O sea que el instituto encargado de fomentar la participación popular y la cultura cívica prefiere organizar actos endogámicos en vez de abrir la convocatoria a la ciudadanía. Extraña manera de hacer las cosas. Dicen que la excusa que dan los organizadores del acto fue que con la desaparición de los institutos estatales electorales y de participación ciudadana “se perdieron” los contactos que tenían con la gente de la asociaciones. Tal parece que también se perdió la iniciativa y el ingenio o si prefiere, una forma de justificar la chamba y el abultadísimo presupuesto del INE que tan caro nos cuesta a todos.
***
En la carrera por relevar al autodefenestrado Manlio Fabio Beltrones en la silla del Gran Pastor del Rebaño Tricolor ha irrumpido con fuerza un nombre. Se trata de José Calzada, actual secretario de Agricultura y exgobernador de Querétaro. Nuestros subagentes dicen que don Pepe no sólo le puede dar una gran batalla al senador Emilio Gamboa, quien también suena fuerte, sino que además sería el favorito del preciso Peña Nieto. Incluso se habla que a Calzada lo vienen preparando desde hace tiempo, aunque en principio se dijo que como un posible bateador emergente para la grande en 2018, cosa que pocos creen. Pero por la forma en la que se han dado las cosas en los últimos días, dicha preparación más bien apuntaba al cargo que hoy ocupa de forma provisional Carolina Monroy, quien tiene la consigna de convocar al consejo político del PRI para renovar la dirigencia. Cuentan que no es fortuito que al sucesor del coahuilense Enrique Martínez en la Sagarpa lo hayan blindado contra la crítica convirtiéndolo en uno de los pocos, sino es que el único, secretario del gabinete que ha publicado la famosa “3 de 3”. En caso de concretarse la llegada del queretano, seguramente el gober de Coahuila, Rubén Moreira, no se sentiría incómodo, ya que el secretario de Agricultura le ha lanzado alguna que otra florecilla en algunos actos en los que han compartido mesa. Claro que de eso a que le deje decidir a sus anchas en la provincia, pues hay largo trecho.
***
Dicen que las apariencias engañan y que a veces el poder está detrás del trono y no delante de él. Aunque en el caso que le vamos a narrar en a continuación deberíamos decir que el poder está en quien firma los cheques. Nuestros subagentes disfrazados de cajas registradoras del Edificio Público Más Caro de la Ciudad nos reportan que últimamente se han salido de control los reclamos de los proveedores inconformes del Ayuntamiento de Torreón en la Tesorería que encabeza Enrique Mota. Pero las quejas no son contra éste en sí, sino contra uno de sus subalternos. Se trata del coordinador financiero, Sergio Arturo Michel, quien como si fuera un pequeño dios no sólo se da el lujo de decir a quién se le paga y a quién no, sino que tiene la facultad de dejar esperando por horas afuera de su oficina a proveedores, directores, contadores y demás personas que van a preguntar por los pagos que no llegan cuando deberían llegar. Dicen que ya son varios los gritos tipo mercado Alianza, con empujones incluidos, los que se dejan escuchar y ver a las afueras de la oficina de don Arturo, quien igual elige al azar si le paga a un maestro de los programas sociales y educativos la impresionante suma de 1,000 pesos por sus servicios, a veces con atraso hasta de seis meses, que a los proveedores a los que se les debe desde miles hasta millones. La situación se ha vuelto tan intolerable que ya varios directores y contadores de diferentes áreas, así como los particulares, han elevado sus quejas al tesorero Mota y al alcalde Miguel Riquelme. Incluso dicen que Michel se ha vuelto experto en todo, y grita, por ejemplo que en cultura, en lugar de tal cantante mejor contraten a tal otro, o en materia de capacitación, que en lugar de tal curso a los empleados del ayuntamiento mejor les den fotocopias de libros para que aprendan y así contribuir al ahorro que tanta falta hace. Caramba.
***
Nos llegan noticias de que a pesar de estar en el ojo del huracán en los últimos meses por sus vínculos políticos y empresariales con el Profe Humberto Moreira, mejor conocido como “El Improcesable”, el diputado Francisco Tobías ya anda en campaña aunque falte prácticamente un año para la elección estatal. Nuestros subagentes disfrazados de adobes de la capirucha estatal nos cuentan que el representante de las empresas de publicidad del exgobernador ha andado muy activo pintando bardas en colonias y firmándolas con su nombre y logotipo (claro, si no, no cuenta), además de que se ha inventado algunos programas en la televisión local para aumentar su exposición mediática y que la gente le conozca un poco más. Incluso este abierto proselitismo le ha ganado ya algunos dardos disfrazados de la propia presidenta estatal del PRI, Verónica Martínez, quien no ve con buenos ojos que ya ande agitando las aguas. Pero, ¿a qué aspira don Pancho? Dicen que sueña con ser el candidato a la alcaldía de la Urbe de Adobe y que en parte por eso se ha convertido en la némesis del actual munícipe panista, Isidro López. El detalle es que no es el único que está en la lista. También suspira fuerte el joven Manolo Jiménez, dirigente municipal del tricolor, también afín al moreirismo y que recientemente fue el que propuso que la selección del candidato a la gubernatura se diera por el método de elección abierta, muy conveniente para don Miguel. Así que ambos andan haciendo méritos dentro del mismo grupo.
***
Pasada la elección del 5 de junio, el PAN tendrá que replantear su dirigencia estatal en Durango de acuerdo a lo que establecen sus estatutos, que indican que tan pronto concluya un proceso electoral, debe también cambiarse el comité directivo estatal. El problema es que en esta entidad, a diferencia de los otros estados donde también ganaron panistas la gubernatura y ya emitieron sus convocatorias, el actual presidente del partido, Juan Quiñones, se rehúsa a dejar el cargo y pretende postergar el proceso hasta que se haya conformado todo el gabinete y equipo de trabajo del gobernador electo, José Rosas Aispuro Torres. Se dice que porque Juan Quiñones aspira a convertirse en el siguiente senador duranguense y quiere hacer los méritos necesarios antes de dejar de representar al partido, aunque haya asegurado públicamente que no buscará la reelección por otros dos años. Hay quienes consideran que lo más sano sería precisamente que cuanto antes saliera dicha convocatoria para abonarle a la funcionalidad del gobernador emanado de este partido -en alianza con el PRD-. Y es que don Juan no ha sido precisamente el mejor representante del partido, al contrario. Durante su gestión se ha caracterizado por no encabezar una verdadera oposición ante el gobierno que está por terminar, pues antes que su posición como presidente del PAN en Durango, cuentan las malas lenguas, está la de empresario constructor, viéndose favorecido con la contratación de obra pública por parte de la actual administración. A nivel municipal, tras la renuncia del expresidente Gustavo Acosta y el nombramiento provisional de Mario Nápoles como dirigente, tendrá que designarse a un delegado para que éste, a su vez, convoque a la elección del comité directivo municipal. La exaspirante a una candidatura para diputada local, Teresa Becerra, es uno de los perfiles que ya se comienza a manejar para encabezar al PAN en Gómez Palacio. A ver de a cómo se ponen los empujones ahora que sí va a haber lana.
