Al parecer se complica el camino del exdiputado federal Guillermo Anaya para contender por la Silla Máxima de Coahuila pues no la tiene tan facilita como algunos creían. En el interior del blanquiazul cada vez se están formando más frentes y se dice que no en apoyo a don Memo. Hace una semana la senadora Silva Garza, también aspirante a ocupar el Palacio Rosa, publicó en su cuenta de Twitter una fotografía con el munícipe de la Urbe de Adobe, Isidro López. Lo que llama la atención es el texto que acompaña la bonita imagen, donde se ven a los dos panistas vestidos de azul, en la mesa de un restaurante:“Con mi amigo @IsidroLopezV coincido en que #Coahuila está ávido de un cambio y trabajaremos para lograrlo”. Según nuestros subagentes disfrazados de banda ancha, a doña Silvia y a don Isidro no les agrada que el exalcalde de Torreón sea el elegido para ser el candidato.
La mencionada publicación refrenda el apoyo que “Chilo” le da a la senadora Garza y al cambio (¿de liderazgos en el PAN estatal o en el Gobierno de Coahuila?). Y siguiendo con don Memo, ya ve que hace días le contamos que había hecho una fiesta en la capital del estado para celebrar su cumpleaños y de pasada, revelar (por si alguien aún no sabía) su deseo de ser el “mejor perfil” del cuadro blanquiazul para lograr la alternancia, tal como lo hizo José Rosas Aispuro en el estado vecino, quien fue uno de los invitados de honor en la pachanga. Desde su elección, el “Güero” Aispuro se ha convertido en casi un héroe para los panistas de la región, por lo que asistentes, como el líder de la bancada panista del Cabildo de Torreón Sergio Lara y la síndica de Vigilancia Gabriela Casale, no perdieron la oportunidad para tomarse la foto con el político de moda. Sin embargo, el que no aprovechó la situación para obtener un redituable recuerdo fue el festejado. Nuestros subagentes, que dirigen un ejército de comunity manager, no han encontrado la imagen de don Memo con el “Güero”. Tal vez sí se la tomaron, pero está muy bien guardada y no saldrá a la luz hasta que Aispuro deje de hacer ronda con Rubén Moreira, situación que dicen, no le causa gracia a Anaya.
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Y es que el gobernador electo de Durango anda muy amigo de don Rubén y del actual mandamás Jorge Herrera Caldera, mucho más de este último según se ve en los diversos medios de comunicación y redes sociales, donde aparecen sonriendo o dándose palmaditas en el hombro. La razón no es porque Aispuro extrañe sus raíces priistas, cuando dirigía el comité estatal del partido, sino que junto a Herrera, ponen el ejemplo de cómo hacer una transición pacífica y no darse hasta con la cubeta como ocurre en otros estados, por ejemplo Veracruz, donde el gobernador electo, el también panista Miguel Ángel Yunes Linares, pide una y otra vez que Javier Duarte sea separado del cargo para que no oculte información sobre todas las mañas que ejerció en su mandato y que pueden ser pruebas para meterlo al bote. Hay algunos malpensados que dicen que Herrera sólo quiere quedar bien para que en el momento de la verdad o cuando el “Güero” se siente en la silla, no saque cuentas contra don Jorge. Sin embargo, mientras tanto, las reuniones entre los dos gobernadores (el saliente y el entrante) con el representante del Mando Especial, Juan Manuel Diaz Organitos, y empresarios de Fomec, celebradas en días pasados, han dejado un buen sabor de boca, pues según dicen nuestros subagentes disfrazados de tazas de café, Rosas Aispuro ha manifestado interés en ver más por La Laguna o al menos se le ven las buenas intenciones.
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Para terminar con esta novela de las aspiraciones y transiciones al poder, se dice que en la Ciudad Jardín, los empujones y rebatingas están a la orden del día, donde cual si se tratara de una fiesta infantil existe una gran cantidad de servidores públicos que quieren sentarse en alguna de las muy peleadas sillas de la administración municipal, y no es para menos, pues ante el descalabro mayúsculo que se dio en la capital y lo poco queridos que son por la futura alcaldesa de Gómez Palacio, los soldados Rebollistas y Campillistas, todos desean acomodarse en Lerdo. El que parece que ya ganó una silla es el regiomontano Antonio Chávez Contreras, quien radica en Gómez Palacio y es responsable del manejo del programa Crecemos. De este personaje se sabe muy poco en Lerdo, pues parece nunca haberse asomado, razón por la cual se espera que los lerdenses, muy celosos de su territorio, empiecen una serie de reclamos a la alcaldesa electa. Para aumentar el descontento, se dice que otros personajes del clan Rebollo, como Hiram Morales o Estrella Morón, tienen más posibilidades de obtener un cargo que los actuales funcionarios de la administración municipal, que buscan repetir o perpetuarse a través de sus equipos. El problema, revelan, es que doña María Luisa actúa como si hubiera ganado sola, sin tener compromisos con nadie. A ver si no se echa más enemigos de los necesarios, antes de que inicie el mes patrio.
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Cuentan nuestros subagentes que en la visita que ayer realizó el presidente Enrique Peña Nieto, a Piedras Negras se pudo ver a toda la clase política de Coahuila que se fue a pasar lista a la ciudad fronteriza. Sin embargo un detalle que llamó poderosamente la atención fue el nivel de popularidad que trae por aquellas tierras el alcalde de Torreón, Migue Riquelme. Y es que fue el político local después del gobernador, Rubén Moreira, más buscado para tomarse la foto y saludar. Pero el detalle más comentado fue el hecho de que el diputado federal, Jericó Abrahamo, se acercara a saludarlo y se quedara varios minutos platicando con él, hecho que para muchos observadores de la política fue visto como el espaldarazo de Jericó a la candidatura de Miguel Riquelme, quien hasta el momento encabeza las preferencias en todas las encuestas hechas rumbo a la gubernatura de Coahuila.
