Veto presidencial

“¿HOY QUÉ TOCA? ¿VIAJE O VIEJA?”

Al momento de escribir estas líneas, la Presidencia de la República hizo saber de la cancelación del evento programado para el 22 de junio donde se anunciaría la promulgación de las Leyes del Sistema Nacional Anticorrupción.

Del mismo modo y con escaso tiempo de antelación, se dio aviso de que el presidente Enrique Peña Nieto no daría el mensaje que tendría verificativo ayer miércoles al filo de las doce del día. En cambio, el vocero Eduardo Sánchez y la canciller Claudia Ruiz Massieu, detallaron las siguientes giras a las que es tan afecto el titular del Ejecutivo. Se va en primera instancia a Canadá pues, dijeron, “el momento por el que atraviesa la relación bilateral es inmejorable”. Sin comentarios…

Todo ello -los movimientos en la agenda de Los Pinos, pues- han suscitado diversas especulaciones. ¿Tanto caló la renuncia de Manlio Fabio? ¿Obedecen a la crisis interna que vive el PRI tras el cinco de junio? ¿Lo ocurrido en Oaxaca es ya un asunto de seguridad nacional? ¿Vienen cambios en el gabinete? ¿Por qué, en medio de tantos problemas, el presidente sale otra vez de viaje como se ha vuelto costumbre cada que ocurre una crisis mayor?

¡VETAR LO DESCAFEINADO!

La sociedad pide a gritos que el presidente ejerza su derecho de veto y no apruebe las Leyes del Sistema Nacional Anticorrupción tal como le fueron enviadas desde el Congreso. Quizá en Los Pinos, donde parece se vive tan alejado de la realidad, ya cacharon algo de ese “mal humor social” que existe, y le recomendaron a Peña Nieto vetar la ley.

En concreto, los artículos 29, en contra de la máxima publicidad de las declaraciones de los servidores públicos y contra de los formatos 3 de 3, y el artículo 32 en el que incluyeron la obligación de que también lo hagan empresarios y empleados, y todas las personas físicas y morales que reciban recursos públicos.

Ejercer el derecho a vetar la legislación significaría un respiro político para el Gobierno de la República en momentos donde nada parece ir bien, y la olla se encuentra en su punto máximo de ebullición.

COROLARIO

Las aves del mismo plumaje vuelan juntas; otras no tanto. La fracción parlamentaria de Movimiento Ciudadano en la Cámara de Diputados analiza las alternativas legales para exigirle al Presidente de la República, hacer un veto sobre los artículos 29 y 32 de la Ley General de Responsabilidades Administrativas, las cuales entierran la Ley 3 de 3, que obliga a que todo funcionario publique sus declaraciones patrimonial, de intereses y fiscal.

“Estamos dispuestos a explorar cualquier alternativa legal para que esto no se consuma. El siguiente paso es exigirle al Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, que haga un veto sobre el Artículo 29 y 32 de la Ley General de Responsabilidades Administrativas, si esto no prospera iríamos nosotros a buscar cualquier recurso legal”, afirmó Clemente Castañeda, coordinador parlamentario de Movimiento Ciudadano, organización política nacional con la primera bancada en presentar su 3 de 3 sin descafeinar.

Lo cierto es que si algo de sensibilidad le resta a la actual administración, no habrá de ignorar el mandato y exigencias de los 634 mil ciudadanos que impulsaron la iniciativa 3 de 3. Hacerlo equivaldría a un suicidio, o a terminar con mucho del escaso oxígeno que aún le resta a un Gobierno que como escribí en este mismo espacio, parece que está empecinado y haciendo todo lo humanamente posible para no repetir en Los Pinos hacia 2018.

Nos leemos en Twitter y nos vemos por Periscopio, sin lugar a dudas: @patoloquasto