Cuando la vida le dio la espalda María Teresa Encino Valdivida optó por ponerse a bailar y al son de la rumba, logró que la vida la viera de frente y le sonriera, pero no satisfecha con eso, ahora ayuda a más personas que, como ella, pasan por momentos difíciles a consecuencia del cáncer.
Fueron dos diagnósticos difíciles los que ha enfrentado en los últimos cuatro años; cáncer de mama y cáncer de pulmón, mismos que enfrentó con gran valor y singular alegría lo que le ha valido superar estas dos enfermedades. En 2012 le fue diagnosticado el cáncer de mama mismo que enfrentó y venció de la mano con su esposo Apolonio y sus cuatro hijos. Al paso del tiempo en el 2014, la vida le quiso poner una prueba más, el diagnóstico se repetía, el cáncer no quería ceder, los médicos le dieron la noticia pero ahora el cáncer se había extendido al pulmón. Para cualquier otra persona hubiera sido motivo para dejar de lado sus sueños, su meta, para María Teresa, fue un reto que quiso tomar con mucha seriedad, una prueba que tenía que superar.
Tras conocer la convocatoria que hizo el DIF Torreón de un concurso de canto y baile, se inscribió y después de ganar el primer lugar, decidió cambiar su estilo de vida, llevando un momento de distracción para los que más lo necesitan.
"A través del baile he tenido la oportunidad de decirles que hasta aquí no se llega, que hay que seguir adelante, que todo pasa".
"Tere" ha destacado en el mundo del espectáculo pues actualmente es exponente del género de la rumba en los escenarios en los que el DIF Torreón lleva a cabo eventos.
