En entredicho. Eduardo Gurza Curiel, director de la Unidad Técnica, es padre de una exdiputada priista del Estado de México.
Un conflicto de interés toca las puertas de la Unidad de Fiscalización del Instituto Nacional Electoral (INE).
Eduardo Gurza Curiel, director de la Unidad Técnica encargada de elaborar el dictamen sobre gastos de campaña de los partidos políticos, es padre de la exdiputada priista en el Congreso mexiquense, Alejandra Gurza Lorandi.
La hija del encargado de fiscalizar las campañas de Coahuila y Estado de México -cuyos dictámenes serán discutidos hoy en el Consejo General del INE- ocupó la curul del distrito 17 de Huixquilucan, supliendo a Carlos Iriarte, exalcalde de ese municipio y actual líder estatal del tricolor.
Además, Gurza Lorandi trabajó como gerente de Recursos Materiales de la Comisión Nacional del Agua, contratada por otro priista mexiquense: David Korenfeld, quien dejó la Conagua cuando fue descubierto usando un helicóptero oficial para asuntos personales.
El esposo de la exdiputada, León Gálico Korenfeld, es sobrino del extitular de Conagua.
Panistas consideraron que tener una hija ligada al priismo mexiquense descalifica a Eduardo Gurza como responsable de la Unidad de Fiscalización del INE, cargo que asumió desde marzo de 2015, cuando Lorenzo Córdova, presidente del Instituto, lo propuso como suplente de Alfredo Cristalinas.
"Cuando nos presentaron al contador Gurza Curiel como nuevo titular de la Unidad, omitió señalar que tiene una hija militante activa del PRI. Esto revela un conflicto de interés", aseguró Francisco Gárate, representante del PAN ante el INE.
Jorge López, representante de la fracción legislativa del PAN ante el Consejo General del INE, dijo que denunciará esta situación en la sesión de hoy.