Traición. Erdogan acusó al presidente del gobierno de Kurdistán de cometer ‘traición’. (AP)
El presidente de Turquía; Recep Tayyip Erdogan, advirtió ayer sobre el riesgo de que surjan conflictos religiosos y étnicos en el Kurdistán iraquí si esa región autónoma se declara independiente tras el referéndum, además reiteró su amenaza de impedir entrada de suministros.
Erdogan acusó al presidente del gobierno regional del Kurdistán, Masous Barzani, de cometer "traición" por celebrar el referéndum de independencia y aseguró que los kurdos iraquíes se "van a morir de hambre" cuando las fuerzas turcas impidan el paso de suministro a través de la frontera.
"Hasta el último momento nos parecía improbable que Barzani cometiese un error tan grande como celebrar el referéndum, pero aparentemente estábamos equivocados", dijo el mandatario, quien agregó que la decisión "es una abierta traición a nuestro país".
Durante un discurso en Ankara, Erdogan consideró que si los dirigentes del norte de Irak no enmiendan su error, pasarán a la Historia como impulsores de una guerra religiosa y recordó que en el territorio reclamado por el gobierno del Kurdistán viven, además de kurdos, numerosos grupos étnicos y religiosos, como cristianos y yazidíes.
Indicó que para impedir la independencia de este territorio de 8.5 millones de habitantes "están sobre la mesa todas las opciones, las medidas económicas y las militares, el cierre de los espacios aéreos y terrestres, todo se está evaluando ahora. "Espero que no haga falta nada de ello para que los dirigentes del norte de Irak renuncien a estas tenebrosas aventuras", enfatizó.
De lo contrario, reafirmó las amenazas de sanciones económicas, en especial en lo referente a la exportación del petróleo kurdo, que se realiza a través de territorio turco, así como al cierre del paso fronterizo de Habur, por el que el Kurdistán iraquí importa la mayor parte de lo que consume.
