Caso. La crisis derivó en el arresto de dos hombres en Holanda, por sospecha de estar involucrados. (EFE)
Dos hombres fueron arrestados en Holanda por sospecha de estar involucrados en el caso de huevos contaminados con un insecticida, que ha provocado pánico en 17 países europeos, informaron ayer jueves las autoridades.
Las detenciones y una serie de allanamientos coordinados en Holanda y Bélgica marcan el agravamiento de la crisis debido a la contaminación de huevos con el insecticida Fipronil. Cientos de productos han sido retirados de las tiendas en Holanda, Bélgica, Alemania y otros países.
Las autoridades sanitarias de otros países, incluyendo Gran Bretaña, han dicho que han encontrado huevos o productos afines de las mismas granjas donde se usó el Fipronil.
La hipótesis que manejan las autoridades es que el insecticida se infiltró en la cadena alimenticia al ser añadido indebidamente en un producto que se usa para evitar que la carne de aves caiga víctima de parásitos.
Aunque nadie se ha enfermado por ello, las autoridades emitieron un comunicado avisando que hay evidencia de que la salud pública se ve en peligro debido "al transporte o aplicación del biocida Fipronil en criaderos de pollos en el sector de la producción de huevos".
Añadieron que la investigación en Holanda se centra en la compañía holandesa que al parecer aplicó el Fipronil, la compañía que lo habría suministrado y el comerciante holandés que trabajó con la surtidora.
En Holanda se producen miles de millones de huevos al año, la mayoría para exportación. Se exportan 5,000 millones de huevos sólo hacia Alemania, según el sindicato de productores avícolas de Holanda.
Docenas de granjas visitadas por la empresa sospechosa de haber usado el Fipronil tienen temporalmente prohibido vender su producto hasta que sus gallinas e incubadoras sean declaradas libres del pesticida.
En los allanamientos ocurridos ayer jueves, que fueron coordinados por la Europol, la agencia policial de la Unión Europea, los detectives confiscaron documentos, datos bancarios, vehículos y propiedades.
Por otra parte la agencia de seguridad alimenticia de Gran Bretaña declaró ayer jueves que el número de huevos que han llegado al Reino Unido de granjas implicadas en el caso de Fipronil es más alto de lo que se pensaba.
